Ximo Puig y Mónica Oltra, PSPV y Compromís, han dado un nuevo paso en su intento por desmantelar las diputaciones provinciales. Con la ley de Mancomunidades, pretenden anular y vaciar de contenido las diputaciones para crear 30 nuevos chiringuitos en los que enchufar a los suyos.
Esa norma esconde una subida de impuestos a los valencianos que sólo servirá para financiar la creación de 30 nuevas entidades supramunicipales. Además, según el articulado de la ley, podrían llegar a crearse hasta 600 nuevos cargos públicos.
No lo digo yo, lo dice el propio proyecto de ley, en su artículo 33, que establece que los recursos económicos de las mancomunidades procederán, entre otros, de ‘los recargos sobre impuestos de la Generalitat o de otras entidades locales’, así como cualquier otro ‘que pueda establecerse’.
Desde el Partido Popular, a través de los diputados del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados hemos presentado un recurso ante el Tribunal Constitucional contra esta ley, por la irresponsable actitud de Puig y Oltra impulsando una norma que ataca directamente a la distribución territorial y administrativa que reconoce la Constitución española. Actitud que responde a su interés por trasladar a la Comunitat todo el proceso que llevó el separatismo en Cataluña con la Ley de Veguerías catalana.
El texto que defienden socialistas y nacionalistas desfigura el mapa de la Comunitat tal y como lo conocemos para inventarse un nuevo escalón administrativo que sólo va a entorpecer la gestión y la prestación de servicios, pero que necesitan PSPV y Compromís para extender su red clientelar y colocar a cargos y afines.
Son ya demasiadas las ocasiones en que Compromís y PSPV demuestran que no creen en una institución que gobiernan y lo único que persiguen es sustituirla por nuevos chiringuitos comarcales para rescatar a sus afines. La Ley de Mancomunidades, lejos de optimizar recursos, agigantará la administración y aumentará el gasto público y por tanto supondrá una subida de los impuestos que pagaremos todos los valencianos.
Esta iniciativa del Consell abre la puerta a vaciar de dinero y competencias las diputaciones con la complicidad del propio gobierno de la institución y forma parte de la estrategia del “Pacte del Botànic” para hacer desaparecer las diputaciones. Una estrategia que no surge de forma espontánea, ya que bebe directamente de un nacionalismo excluyente que lamentablemente sirve de referente para los integrantes del Botànic.
Frente a esta propuestas, desde el Partido Popular defendemos el valor de las Diputaciones como elemento vertebrador básico e indispensable, especialmente en localidades de menos de 20.000 habitantes. La institución provincial debe seguirtrabajando para que cualquier ciudadano reciba los mismos servicios, sin perjuicio de la localidad que libremente haya escogido para vivir.
Mari Carmen ContellesPortavoz Grupo Popular Diputación de Valencia