Los incendios se apagan en invierno y las inundaciones se pueden evitar en verano. Si los barrancos de Alzira hubiesen estado libres de ramas y porquería, probablemente, no se hubieran desbordado y los vecinos de estalocalidad de La Ribera no hubiesen pasado la noche de miedo e incertidumbre que se vieron obligados a padecer en el último episodio de fuertes lluvias.
En el Carraixet, al que Jaume I denominó “riu sec”, el problema se produce cuando tras el desbordamiento, se ha de cortar la CV-304 y distintos pueblos de l’Horta se quedan incomunicados. Es una carretera muy transitada, en 2017 una mujer hubo de ser rescatada de su vehículo y, aunque afortunadamente salió ilesa, el riesgo es elevado cada vez que se producen lluvias torrenciales.
Ciudadanos (Cs) lleva mucho tiempo reivindicando una solución para evitar que la carretera que une Vinalesa y Alfara del Patriarca se convierta en un río cuando llueve intensamente. Por su parte, Cs de Alzira ha pedido en numerosas ocasiones la limpieza de los barrancos y ha advertido del riesgo del abandono de los espacios inundables. Sin embargo, y a pesar de recibir el apoyo unánime del resto de grupos políticos, las ramblas han seguido igual porque la CHJ (Confederación Hidrográfica del Júcar) no ha hecho nada.
Tras este desastre, visité Alzira y comprobé que crecen árboles en el cauce y que los torrentes están completamente llenos de maleza. Desde luego, hay que buscar mecanismos que obliguen ala limpieza de estos espacios porque, además, no sólo acumulan la suciedad que se ve, sino también la de vertidos incontrolados que pueden ser nocivos para el medio ambiente.
A esto hay que sumar que la porquería y la vegetación acumulada es una fuente de propagación del fuego y un foco de plagas. Se mire por donde se mire, la limpieza de los barrancos no es baladí, es de gran importancia para evitar daños en caso de inundaciones e incendios. En esto, todos estamos de acuerdo. No obstante, la historia se repite una y otra vez.
En la pasada legislatura, el gobierno de la Diputación de Valencia aprobó un plan para poner a disposición de los ayuntamientos los medios para la limpieza de los barrancos. Hace un año y medio la delegación del Gobierno impulsó la colaboración de la CHJ, la Diputación, la FEMP (Federación Valenciana de Municipios y Provincias) y los ayuntamientos para su mantenimiento. Pero parece que nada de esto ha dado resultado.
Ciudadanos (Cs) considera que no se puede demorar más una solución definitiva. Es necesario que la limpieza de los barrancos sea una constante. Que se haga de manera continuada y ordenada para que los cauces estén siempre limpios. Las fuerzas políticas hemos de ser capaces de concretar estos mecanismos para evitar inundaciones e incendios, que pueden convertirse en daños materiales, y lo que es más grave, en daños personales.