Política

El Pla d'Infraestructures Socials de Oltra traerá nuevas residencias a las zonas más envejecidas

La col·laboració interinstitucional entre la Generalitat, les diputacions i els ajuntaments serà clau en aquest Pla d’Infraestructures Socials

1 minut

Inicio X Legislatura Corts Valencianes-2

Después de vaciar los cajones de expedientes nunca registrados ni ejecutados, sacarles el polvo y descubrir de nuevos en rincones inusuales, cuando entró el Botànic a gobernar, hace ahora poco más de 5 años, el sistema de dependencia y de los servicios sociales valencianos empezaban a ver la luz al final del túnel, puesto que con Mónica Oltra al frente de la consellería de Igualdad y Políticas Inclusivas se ponía el centro de atención en las personas más vulnerables. Después de la Renta Valenciana de Inclusión y toda una serie de ayudas destinadas a la mejora de a situación de las personas con diversidad funcional, víctimas de violencia de género, personas mayores, etc., el foco se pone especialmente en el centro de las personas más vulnerables, ahora más que nunca, con la situación de pandemia que estamos viviendo con la COVID-19. De este modo, la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra ha anunciado recientemente un nueve Plan de Infraestructuras Sociales con el cual "se incluirá tanto la construcción de nuevas infraestructuras como la reforma de centros actuales".

'Más de 500 millones para construir nuevas residencias y otras reformarlas'

Con el objetivo de aplicar los nuevos modelos residenciales, fruto de un intenso y profundo trabajo en el sector, y basados en la proximidad y en la creación de espacios pequeños que se asemejan lo máximo posible a un hogar, este modelo "se ha demostrado mucho más efectivo en la lucha contra la COVID", según Oltra. Además, desde la misma consellería, se está trabajando sobre la base de un mapa de necesidades y el Plan de Infraestructuras Sociales tendrá un presupuesto de más de 500 millones de euros. De este modo, se posa en trabajo el fomento de la equidad territorial, para que todo el mundo tenga derecho a los recursos que necesito independientemente de donde viva y además, con este nuevo proyecto llevará a cabo la creación de puestos de trabajo desarrollando la economía de las tres C.

Políticas Inclusivas ha diseñado un mapa de las infraestructuras que son necesarias en la Comunidad Valenciana donde se analiza la demografía teniendo en cuenta el nivel de envejecimiento, el número de personas con diversidad funcional, etc. Sin embargo, desde 2017, se empezó a trabajar conjuntamente desde Políticas Inclusivas y la Diputación de València donde los municipios cedían en la Generalitat el solar para el centro o el edificio a reformar, la Diputación edificaba o reformaba y finamente, la consellería dotaba de equipo, tanto mobiliario como de personal para ponerlo en funcionamiento.

'Doce centros desde 2017'

Este método de trabajo ha conseguido por el momento llevar a cabo las primeras acciones en una decena de centros y a 2017 se ejecutó la subvención de 800.000 euros para un nuevo centro con veinte plazas de enfermos mentales así como un centro de día y de integración y rehabilitación (CRIS) de 70 plazas en Carcaixent.

Por otra parte, un proyecto de Residencia para personas con diversidad funcional intelectual de 36 plazas en Paterna por un total de 1.599.287 euros, otra Residencia para personas con diversidad funcional intelectual de 40 plazas en Sueca junto con un centro de día para personas con diversidad funcional intelectual de 40 plazas por un total de 2.279.961 euros, así como una Residencia de primera acogida para la infancia en Llíria con el presupuesto de 910.478 euros.

Respecto a los proyectos de Carcaixent, las obras están finalizadas y el centro está en funcionamiento desde el 15 de abril de 2019, el centro de Paterna también está finalizado pero faltan los últimos trámites. El centro de Sueca está autorizado desde mayo de 2019 y solo se presentó una fundación local para su gestión, la cual se puso en funcionamiento el pasado 1 de octubre. Respecto a la residencia de Llíria, el Ayuntamiento estimó que solo había bastante fondo para realizar una primera fase y que haría falta una segunda con una inversión parecida.

Durante los ejercicios siguientes, en 2018 y 2019, se adjudicó un centro de día de mayores con 25 plazas en Agullent, donde se destinaron en torno a 600.000 euros; otro en Meliana para dar cobertura hasta 100 personas y el presupuesto de las cuales se situaba en 3,7 millones de euros; otro centro de día en la Font de la Figuera con un total de 40 plazas el coste de las cuales aumentaba hasta 1,3 millones de euros; una residencia de la tercera edad con capacidad para 40 usuarios que, además, estaría destinado en centro de día para 100 personas en Mislata la obra de las cuales se encuentra en marcha pero que la COVID-19 ha retrasado la ejecución, la cual estaba presupuestada por un total de 4,4 millones de euros; la rehabilitación de un centro social al cual acuden las personas mayores de 65 años que viven suelas en Aras de los Olmos por 177.142 euros; y varias actuaciones en Ademuz entre las cuales se encuentran la construcción de un centro día de mayores de 40 plazas por 446.607 euros y la rehabilitación de un edificio municipal las instalaciones del cual se utilizan para poder hacer talleres ocupacionales con personas con diversidad funcional por 369.832 euros.