¿Es maltrato a las mujeres negar la evidencia del machismo? ¿Y justificar en el alcohol actitudes no consentidas? ¿Es maltrato preguntarle a una mujer en una entrevista de trabajo si desea ser madre? ¿Y utilizar su cuerpo como reclamo? ¿Es maltrato echarle los trastos a desconocidas por la calle? ¿E insistir si ella dice que no le gustas?
Todas estas preguntas y otras más obtienen siempre la misma respuesta: “Asúmelo, es maltrato”. Quince carteles diferentes que visibilizan las formas más comunes de acoso, abuso o manipulación de una mujer por parte de un hombre estarán presentes en las marquesinas del autobús urbano de Xirivella durante las próximas semanas. Reproducen actitudes habituales para que la ciudadanía perciba e identifique el machismo en todas sus modalidades.
La campaña publicitaria coincide con los diferentes actas programados alrededor del 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres, y está coordinada con el área de Igualdad de la Mancomunitat de l'Horta Sud. “Queremos visibilizar todas las formas de violencia que no detectamos a simple vista e insertarlas en el día a día de la gente”, declara Paqui Martínez, concejala de Igualdad. “La sociedad tiene que sacarse el machismo de dentro y solo hay un camino: sensibilizar, educar y concienciar”, concluye la edil.
Controlar el WhatsApp de la pareja, pensar que el consentimiento de la chica no es importante en una relación sexual, insistir a una mujer que te ha dicho que no, presionarla para que te facilite sus contraseñas, pagar por tener sexo, realizar tocamientos en el transporte público, decirle cómo se tiene que vestir, escudarse en el grupo para cometer agresiones sexuales, disponer de su dinero y, por supuesto, empujarla o golpearla. Actitudes que deben asumirse como maltrato, indistintamente si se es autor, víctima o testigo.