El Ayuntamiento de Xirivella ha consignado, mediante una nueva modificación de crédito aprobada en Pleno, 282.000 euros adicionales para la limpieza viaria y la recogida de residuos urbanos. Este incremento, que supone un 25% en términos porcentuales sobre lo presupuestado inicialmente, se ha empezado a implementar en el último trimestre de 2020 y tendrá continuidad durante el año próximo. La partida incluye la contratación de cuatro nuevos peones mochileros, hasta completar un total de seis, cuya función es desinfectar periódicamente los puntos críticos del municipio y las zonas de mayor afluencia: accesos a los centros escolares, centro de salud, paradas de autobús y tren, inmediaciones de supermercados y Mercado Municipal, mobiliario urbano, etc. Se aumentan también un 50% las horas de limpieza con agua a presión (baldeo o equipo hidrolimpiador), un servicio muy demandado por la ciudadanía en tiempos de pandemia.
Por otra parte, la ampliación presupuestaria mejora y diversifica la gestión de residuos. La implantación del contenedor marrón, que se ejecutará antes de fin de año, permitirá separar en origen la basura orgánica de aquellos otros residuos (mascarillas, pañuelos desechables, guantes o pañales) susceptibles de contener carga vírica. Otra novedad es la puesta en marcha de un sistema de recogida selectiva de residuos sanitarios tipo 2, específicamente enfocado a las clínicas de fisioterapia, dentales o veterinarias, que completa el sistema ya implantado en residencias de tercera edad y centros de salud desde el pasado mes de abril. Por último, el Ayuntamiento de Xirivella contará, a través de la concesionaria SAV, con un Educador Ambiental dedicado a la información de proximidad a la ciudadanía y empresas para un reciclaje más eficiente y sin impacto en la imagen urbana.
"El concepto de residuo urbano vive una profunda transformación en nuestros días", asegura el concejal de Infraestructuras y Limpieza Viaria, Vicent Sandoval. "No todo lo que nos sobra es la misma basura ni merece el mismo trato: los residuos reciclables son verdaderos recursos con valor. Mascarillas o pañuelos usados no podrán ir al contenedor marrón, ya que en caso de contagio propagan la COVID en la cadena de tratamiento pudiendo contagiar a los trabajadores. Esos residuos deberán ir al contenedor verde o fracción resto. Por otra parte, todo el excedente orgánico de los hogares, los restos de alimentos depositados en el contenedor marrón, se convierten mediante compostaje en fertilizante para uso agrícola. Separar nuestros residuos es mucho más que un acto cívico, es un acto inteligente",concluye Sandoval.