La final que todos estaban esperando. La gran partida de la temporada, del año. El próximo sábado, a partir de las 17.30 h. (À Punt), el trinquet de Xeraco acoge el duelo más anhelado por la afición del raspall. Tonet IV, del Genovés, se enfrenta a Iván, de Ontinyent, en el duelo que decidirá el nuevo campeón del Individual de la modalidad. En juego, más que un título, está la hegemonía de la modalidad.
Los dos pilotaris llegan a la final acompañados por la justicia que han reflejado los marcadores de las partidas disputadas durante la competición y por las sensaciones positivas que se han respirado sobre las losas en estas últimas semanas. En el caso de Tonet IV, las cifras son igual de indiscutibles cómo su nivel de juego. El actual campeón del torneo, aspirando a la cuarta victoria consecutiva, ha ganado las tres partidas que ha jugado hasta ahora de una manera clara y rotunda. En total, solo ha encajado 20 tantos en contra. De nuevo, el mitger de la Costera se ha multiplicado en este campeonato que tanto le gusta. Poderoso en el saque, rápido de movimientos y pensamientos, eléctrico en el colpeo y siempre ofensivo en el quince, Tonet IV se ha ganado por méritos propios, de nuevo, ser el favorito en la final. Sus resultados en las últimas temporadas y su rendimiento en esta complican mucho la travesía en su contra. Es el rival a batir, pero de nuevo ha conseguido estar preparado para subir el último escalón hacia el éxito.
Esto sí, este año tendrá ante Iván. El de la Vall d'Albaida vive un año de gracia y, por primera vez, disputará una final del Individual. En diciembre se impuso con mucha solvencia en el torneo mano a mano que organizó la Fundación, pero en aquella competición no participó Tonet IV. Unos meses más tarde, después de haberse proclamado campeón de la Liga, Iván tiene la ocasión de demostrar que está capacidad para destronar el actual rey del raspall y apropiarse de la corona. Tiene todas las condiciones para hacerlo. Con solo 21 años, Iván viene de dejar a 0 a Marrahí en las semifinales. Su capacidad para la concentración, para el juego preciso y la minimización de los errores, juega a su favor. Ahora bien, tendrá que imponer su pegada, su capacidad física y técnica, a los nervios que siempre atacan al debutante en una final. Si lo consigue, el de Ontinyent presentará una dura batalla sobre la cancha.
Con todo, Tonet IV e Iván prometen una final apasionante, atractiva para el espectador y vibrante para los jugadores. La corona, el reinado y la hegemonía del raspall, desde hace tres años en poder de Tonet IV, vuelven a estar en juego. Iván luchará para obtenerlos. Y que gane el mejor.