Vicent nació en Llombai, en la Ribera Alta y fue ordenado sacerdote en 1969. Durante sus 50 años de ministerio sacerdotal, su trayectoria lo ha llevado por varias comunidades parroquiales como Ontinyent, Valencia, Tavernes de la Valldigna, Alaquàs y Patraix. Es en 2008 cuando llega a Picassent, concretamente a la parroquia de San Cristóbal Mártir donde se hace cargo, también como consiliario, de las Escuelas Parroquiales.
Su tarea como sacerdote la ha complementado con varios cargos como por ejemplo la fundación y dirección de la revista Saó, una de las primeras editadas íntegramente en valenciano. Tampoco le han faltado reconocimientos a lo largo de toda esta etapa: en 2004 el Ayuntamiento de Alaquàs le impuso la Medalla de Oro por su compromiso social con la ciudadanía. En el año 1998 recibió uno de los Premios de Actuación Cívica de la Fundación Lluís Carulla. Vicent ha participado activamente en la lucha por la superveniencia de la lengua catalana en los ambientes eclesiásticos y ha sido impulsor del movimiento Scout allá por dónde ha pasado.
Llegada ahora la celebración de sus 50 años como sacerdote, el sábado, 21 de septiembre, tuvo lugar en Picassent una Eucaristía, presidida por él mismo y concelebrada por varios sacerdotes, entre ellos su coetáneo en Picassent, Enric Cervera y otros sacerdotes hijos de la localidad. Acompañado por su familia y amistades, el Movimiento Escolta l'Om de Picassent, la Schola Cantorum de la parroquia de San Cristóbal Mártir, la Cofradía Mare de Déu de Vallivana, los catequistas de Primera Comunión y Confirmación, Amics del Corpus, el profesorado del colegio San Cristóbal y una representación de las diversas parroquias donde ha sido destinado durante estos años. La ceremonia tuvo muchos momentos emotivos y de recuerdo de estos 50 años. Vicent, visiblemente emocionado, quiso agradecer a todas las personas presentes su presencia y acompañamiento. La alcaldesa de Picassent, Conxa Garcia, también quiso compartir este momento tan importante en la vida de mossén Cardona.
Al acabar la celebración eucarística, la comitiva se trasladó hasta la ermita donde se cantaron los gozos y el himno a la Mare de Déu en acción de gracias. Seguidamente, la Junta Directiva de la Cofradía Mare de Déu de Vallivana lo nombró cofrade de Honor y le impuso la medalla de Oro de la misma.