El vecindario de Simat de la Valldigna ha decidido que los presupuestos participativos se inviertan en salud pública, que afecta varias áreas de la actividad municipal como sanidad, reciclaje, limpieza viaria, recogida de excrementos de animales, atención a personas con discapacidad, información, control y seguimiento de la pandemia, contaminación atmosférica o campañas informativas sobre el cáncer de mama, el alcoholismo o la drogodependencia, entre otros.
La encuesta, que se inició el lunes de manera telemática hasta el viernes 15 de enero, ha contado con 61 participantes, 19 de los cuales escogieron la opción salud pública. La segunda temática más votada ha sido la relacionada con las infraestructuras.
El alcalde de Simat de la Valldigna, Víctor Mansanet, ha declarado que «a causa de las circunstancias sanitarias provocadas por la pandemia este año no se ha podido celebrar la audiencia pública», a pesar de que añade que «en un futuro se regulará la participación para que sea más efectiva a través de medios telemáticos».