En un esfuerzo por mejorar la calidad de vida en la ciudad y adaptarse a las nuevas exigencias climáticas, el Ayuntamiento de Valencia está llevando a cabo una serie de rehabilitaciones en sus mercados municipales con el objetivo de, además de mejorar su actividad económica, convertirlos en refugios climáticos. Este lunes, la alcaldesa María José Catalá visitaba las obras realizadas en el mercado de Rojas Clemente como ejemplo de esta hora de ruta. Una visita en la que destacaba la importancia de estas instalaciones no solo como centros comerciales, sino también como espacios de protección ante las altas temperaturas.
"Estamos invirtiendo en nuestros mercados para que, además de ser lugares de encuentro y comercio, se conviertan en refugios seguros durante los episodios de calor extremo", declaraba Catalá durante su visita a este mercado ubicado del barrio del Botànic. La rehabilitación del espacio, que ha cumplido 60 años, ha supuesto una inversión total de 1,2 millones de euros, repartida en varias fases destinadas a mejorar tanto la estructura como la eficiencia energética del edificio.
Rehabilitación del Mercado de Rojas Clemente
El Ayuntamiento ha destinado alrededor de 600.000 euros en la renovación del mercado de Rojas Clemente. La primera fase, con un presupuesto de 400.000 euros, se centró en resolver problemas urgentes en la zona subterránea del edificio. "Las obras urgentes han terminado y hemos conseguido reforzar todo el sótano, evitando filtraciones y mejorando la pescadería", informaba la alcaldesa. Esta intervención ha sido fundamental para asegurar la integridad estructural del mercado y garantizar la seguridad de sus usuarios.
La segunda fase, cuya ejecución está prevista para principios de 2025, incluye una serie de mejoras en las instalaciones y el sistema envolvente del edificio. Con un presupuesto de 216.684,49 euros, esta etapa tiene como objetivo modernizar la imagen del mercado y mejorar su funcionalidad. "Queremos que este mercado, que cumple 60 años, sea uno de los más modernos y bonitos de nuestra ciudad", afirmó Catalá, destacando la importancia de mantener estos espacios actualizados y atractivos tanto para los comerciantes como para los consumidores.
En paralelo, la alcaldesa anunciaba una tercera fase de inversión prevista para 2026, con una dotación de 500.000 euros. Esta última etapa se enfocará en la mejora energética del mercado, con la sustitución de luminarias, la instalación de un nuevo sistema de aire acondicionado y la renovación de ventanas. "Finalizaremos aquí con una última fase de mejora energética. Tenemos mucha ilusión en la parte de la eficiencia energética y el autoconsumo", explicó Catalá, subrayando la importancia de convertir los mercados municipales en instalaciones autosuficientes y adaptadas a las exigencias climáticas actuales.
El Mercado del Cabanyal, un año después
Dentro de estas inversiones recientes, cabe destacar la reparación estructural del Mercado del Cabanyal, que celebra esta semana el primer aniversario de su reapertura tras una serie de obras de mejora. Estas obras, que se realizaron en tiempo récord durante el mes de agosto del año pasado, respondieron a una necesidad urgente detectada en la auditoría que se está llevando a cabo para evaluar el estado de los mercados municipales.
Los trabajos en el Mercado del Cabanyal se centraron en la reparación estructural de la cubierta y la fachada, así como en el derribo del falso techo que presentaba desprendimientos peligrosos. La intervención más urgente fue la eliminación del falso techo, que permitió descubrir el techo original del edificio, ahora rehabilitado y exhibido como parte del valor arquitectónico del mercado. "Esta rehabilitación no solo ha mejorado la seguridad, sino que también ha puesto en valor el patrimonio arquitectónico de uno de nuestros mercados más emblemáticos", comentó el concejal de Comercios y Mercados, Santiago Ballester.
Refugios climáticos para la ciudadanía
El concepto de refugios climáticos es central en la visión del gobierno municipal de Valencia para sus mercados. En un contexto de cambio climático, donde las olas de calor son cada vez más frecuentes e intensas, estos espacios proporcionan un lugar seguro y fresco para que los ciudadanos puedan refugiarse y descansar.
La rehabilitación de los mercados no solo mejora la calidad del servicio ofrecido a la ciudadanía, sino que también contribuye a la competitividad de estos establecimientos. En este sentido, el compromiso del Ayuntamiento de Valencia con la modernización y sostenibilidad de sus mercados municipales es claro. Estas intervenciones no solo mejoran la infraestructura y eficiencia energética de los edificios, sino que también refuerzan su papel como espacios públicos vitales para la ciudadanía. Los mercados no solo son puntos de encuentro para el comercio local, sino también refugios climáticos que ofrecen seguridad y confort a los ciudadanos en momentos de crisis climática.
A medida que Valencia avanza en la implementación de estas mejoras, el gobierno local continúa apostando por la rehabilitación de más espacios municipales, como parte de una estrategia integral para hacer frente a los desafíos del cambio climático y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Los mercados municipales de Valencia se están transformando en mucho más que simples lugares de comercio, consolidándose como espacios multifuncionales al servicio de la ciudadanía.