La ciudad de València detectará y monitorizará los casos de viruela del mono gracias al sistema de detección en aguas residuales. Una iniciativa impulsada por Global Omnium, la empresa especializada en el ciclo integral del agua, con un sistema pionero basado en el utilizado en los dos últimos años para la detección de SARS-CoV-2.
La compañía valenciana ha iniciado ya el rastreo en la capital del Turia y en diferentes capitales españolas. Es en Golab, el laboratorio de Global Omnium, donde se analizan las muestras de agua ya que, para poder ser detectado y cuantificado, "son necesarios equipos con una avanzada tecnología, así como personal altamente cualificado", han precisado en un comunicado.
Desde la empresa aseguran que las aguas residuales constituyen a día de hoy una "fuente esencial" para conocer "información muy valiosa" sobre determinados aspectos relacionados con la salud de la población de la que provienen, ya que, dentro del marco de la Epidemiología de las Aguas Residuales (WWBE en inglés), se puede monitorizar la circulación de determinados agentes patógenos o infecciosos (SARS-CoV-2, viruela del mono, gripe, enfermedades de transmisión sexual, o el virus de la polio, entre otros muchos), así como de drogas de abuso, fármacos y compuestos químicos o biológicos, metabolitos, e incluso la presencia de genes de resistencia a antibióticos.
¿Cómo se detecta la viruela del mono?
El procedimiento para la detección del Monkeypox o viruela del mono es "muy similar" al ya utilizado para detectar y cuatificar el SARS-CoV-2, puesto que, a partir de una misma muestra de un litro de agua residual tomada en condiciones estériles, se procede a la concentración y extracción del material genético y, a partir de ese extracto, se realiza la PCR específica para este virus en paralelo a la que se lleva a cabo para las determinaciones de SARS-CoV-2.
De esta forma, es posible monitorizar la evolución de la cantidad de virus circulando en un territorio y evaluar tendencias, así como alertar a las Autoridades Sanitarias para materias de prevención.
El virus de la viruela del mono es otro de los muchos agentes patógenos que se excretan bien sea por heces, por orina, o por ambas vías, lo que permite detectar sus restos genómicos en las aguas residuales.