Un equipo técnico impulsará nuevas medidas para continuar reduciendo la factura energética, que supone el 4,2% del presupuesto municipal

“La voluntat del Govern de la Nau és aprofitar i reciclar tot el que es puga per a no malgastar ni un euro de la ciutadania”

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Imagen de una bombilla
Imagen de una bombilla

Para continuar en la línea que ya ha permitido ahorrar 1.828.947 euros anuales en alumbrado público mediante el Plan de Eficiencia Energética o 500.000 más con el Plan de Apagado, este jueves se formalizará la constitución de una comisión técnica cuya tarea será impulsar nuevas medidas para reducir la factura energética que supone todavía el 4,2 % del presupuesto municipal, según han informado ayer en rueda de prensa los concejales Jordi Peris, de Cambio Climático y Participación, y Sergi Campillo, de Gobierno Interior, que han presentado el Diagnóstico Energético y Plan de Actuación del Ayuntamiento.

“En la junta de gobierno lo que aprobaremos es la constitución y la formalización de un grupo de trabajo en tema de eficiencia energética, del que forman parte técnicos municipales, que abordará  de manera integral y transversal la cuestión de la energía en todos los edificios municipales con la intención de, a partir de la auditoria energética que hemos hecho y que nos ha permitido dotarnos de una visión de conjunto de todos los consumos, establecer las medidas y prioridades más oportunas para avanzar hacia una reducción del consumo y  un modelo de consumo energético más sostenible”, ha asegurado el concejal de Cambio Climático y Participación, Jordi Peris, en la presentación de los resultados del diagnóstico energético que va a dar paso a  un  plan de actuación para seguir reduciendo la factura gracias a una eficiencia y destinar el ahorro a otras necesidades ciudadanas.

En similar sentido se ha manifestado el responsable del área de Gobierno Interior, Sergi Campillo, que ha afirmado que “desde el Govern de la Nau pensamos que cada euro que paga la ciudadanía a través de las tasas e impuestos se ha de gastar con mucho cuidado y con mucho conocimiento. Por eso hemos iniciado este proceso de eficiencia energética con el que estamos reduciendo la factura de la luz mediante el impulso de mejores soluciones de alumbrado público y de consumo energético para los edificios municipales y para la ciudad de Valencia, de forma que el importe de esa bajada de la factura de la luz se pueda destinar a otras partidas donde sea más necesario, como ayudas sociales o inversiones en los barrios”

Sergi Campillo ha destacado los resultados del Plan de Eficiencia Energética, financiado con 4 millones de euros a interés cero a través del Fondo Nacional de Eficiencia Energética, que va a suponer una reducción del 30% del consumo y un ahorro anual de 1.828.947 euros. En ese mismo sentido la aplicación presupuestaria de energía contempla para 2017 una reducción de las partidas, entre alumbrado público (2.599.399 euros) y dependencias municipales (237.429 euros), de más de 2.800.000 euros con respecto a 2016. “A través del Plan de Apagado estamos reutilizando farolas de algunos lugares donde sobraba luz para llevarlas a otros barrios donde las que había eran mucho más antiguas. “Este gobierno no quiere malgastar ni un euro. Todo lo vamos a aprovechar y a reciclar con el único objetivo de gastar adecuadamente el dinero de la ciudadanía”

Ahorro y reducción de emisiones

Jordi Peris ha puesto de relieve que esta auditoria energética, en lugar de encargarla a una empresa externa, “lo que hemos hecho ha sido constituir este grupo de trabajo para que sean los propios técnicos municipales, los empleados públicos quienes tengan toda la información disponible y armonizada para poder comparar la situación de cada uno de los edificios, y sea desde dentro de la casa donde se establezcan las prioridades en términos de inversiones para una eficiencia energética. Con ella nos dotamos de una herramienta básica para armonizar la gestión”.

Tanto Campillo como Peris han destacado el aspecto de que cara al futuro los procesos de ahorro energético “incorporan un aspecto de potencial pedagógico y elementos de participación ciudadana” que están en sintonía con las iniciativas de lucha contra el cambio climático en cumplimiento del Pacto de alcaldes para reducir en un 40% las emisiones de C02 antes de 2030, aplicadas también a los edificio municipales y al alumbrado público. Peris ha insistido en el “carácter estratégico de la gestión energética con decisiones integrales y globales”.

Este diagnóstico es el punto de partida para continuar con las iniciativas de ahorro y eficiencia energética. En este sentido, Sergi Campillo ha informado de que la factura de energía y agua (alumbrado y riego supone una de las partidas más importantes del presupuesto municipal, concretamente un 4,2%). Para el año 2017 se contempla una previsión de 11,33 millones para alumbrado público, 1,7 millones para consumo en las escuelas y 5,4 para las dependencias municipales, pese a que el descenso registrado desde 2010 a 2015 se eleva a 6.275.000 euros, de los cuales 6.105.000 corresponden a alumbrado público.

En el equipo de trabajo constituido están representados trabajadores de  Servicios Centrales Técnicos, Ciclo Integral del Agua, Palau de la Música, InnDEA, Servicio de Energías Renovables u EMIVASA, “que serán los encargados de hacer un seguimiento mensual de suministros con una metodología orientada a transformar los costes energéticos y realizar propuestas de inversiones para la mejora energética que puedan incorporarse a todas las obras y proyectos del Ayuntamiento”, ha señalado Peris, que ha añadido que la labor de este equipo cuya constitución se formaliza hoy en la Junta de Gobierno ”será muy fructífera para definir prioridades”.

Un 40% en alumbrado público

Campillo ha matizado que, también en el ámbito energético, son los técnicos municipales “quienes mejor pueden darnos las indicaciones para mejorar esta administración”. Ha recordado el concejal que el Plan de Eficiencia energética afecta al 20% de los puntos de alumbrado público, y se ha referido al Plan de Apagado iniciado en diciembre de 2015, “con un coste mínimo y un ahorro de cerca de medio millón de euros”, a la introducción de nuevo software para compensación de energía reactiva, con un ahorro anual estimado de 17.000 eros, al Programa de Gestión de Ahorro y Eficiencia energética y a la evolución del consumo de energía en el periodo 2010-2015, con ese descenso ya señalado de más de 6 millones de euros.

En cuanto al destino del ahorro generado ha resaltado es dinero no gastado en energía permite poder acometer “inversiones en barrios o proyectos participativos”, además de destinar 500.000 euros a la reposición de instalaciones de cable de cobre que ha sido sustraído e instalación de detectores para evitar e intervenir ante nuevos robos, acometer nuevas medidas de ahorro energético en el alumbrado público. “Todas las decisiones sobre ahorro energético pasarán por esta comisión que se crea, que será la encargada de estudiar las mejores medidas y actuaciones para seguir bajando la factura de la luz”.

Ha contado que de la factura energética municipal un 40%, que supone 8.800.000 euros corresponde al consumo en alumbrado público, mientras que el 10% corresponde  a las escuelas y colegios. Los edificios municipales suponen el 7,9 % del consumo y las instalaciones deportivas el 6,34.

En cuanto a los edificios municipales, el de mayor consumo “por ser el que tiene mayor número de funcionarios” es Tabacalera, al que le siguen el Palau de la Música, el Palau de Congresos, el Centro la Petxina y la Casa Consistorial, en este mismo orden.

Este diagnóstico plantea también medidas para mejorar los hábitos, prácticas y comportamientos en materia de consumo energético que sumen ahorro, e incluso propuestas para que el ahorro conseguido en centros escolares “mediante propuestas energéticas que valoren la situación del colegio” se reparta al 50%; la mitad para dedicarlo a nuevas medidas de mejora de la eficiencia energética, y la otra mitad para el destino  que acuerde el propio centro.

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