El soterramiento de la Ronda Norte a su paso por Benimaclet sería un proyecto viable que permitiría conectar el barrio con la huerta, recuperando el camí de Farinós y el de Les Fonts. Así lo recoge el estudio de viabilidad de un proyecto alternativo, presentado por la Asociación Vecinal de Benimaclet, que además cuenta con el apoyo del vecindario y de entidades cívicas del barrio.
Un proyecto basado en la participación que, como aseguran desde la asociación a través de su cuenta de Facebook, “no pretendemos que se realice ya, pero sí que se tenga en cuenta para la redacción del planeamiento (área funcional 18) que se está realizando”. Así, la propuesta contempla, además, la creación de una cubierta ajardinada para la superficie; mientras que el paso subterráneo contaría con tres carriles por sentido.
Este martes, el alcalde de València, Joan Ribó, descartaba que la idea de soterrar la Ronda Norte a su paso por Benimaclet haya supuesto “un enfrentamiento” entre los dos socios del gobierno municipal – PSPV-PSOE y Compromís – “en todo caso, puede ser una diferencia”, ha matizado Ribó.
Y es que mientras Compromís considera que este proyecto sería positivo para la huerta de Benimaclet y Benicalap – “no es solo Benimaclet”, ha recalcado Ribó – desde el partido socialista apuestan por utilizar el terreno para la construcción de vivienda pública. “Con los 50 millones para la ronda de Benimaclet, podríamos hacer un gran parque público de vivienda. Hay que poner las cifras en contexto porque soterrar, por ejemplo, las vías del Grao costaría 80 millones de euros. Debemos tener muy claras cuáles son las prioridades de la ciudad y con 50 millones podríamos estar hablando de un parque de vivienda pública muy interesante y de servicios públicos de calidad para el barrio de Benimaclet”, explicaba la vicealcaldesa y líder del PSPV-PSOE, Sandra Gómez.
Gómez ha recalcado, además, que los beneficios de esta infraestructura solo afectarían a una pequeña parte de la ronda a su paso de Benimaclet, mientras que los perjuicios se trasladarían a los barrios colindantes de Orriols y Torrefiel “porque el informe habla de una rampa de salida de 260 metros”. Así, la vicealcaldesa defiende una opción más integral para las personas de todos los barrios que conviven con las rondas.
Sin embargo, desde la Asociación Vecinal de Benimaclet lo tienen claro: “No pretendemos ningún privilegio sobre otros barrios. Cada barrio tendrá su solución, pero aquí, en el barrio de Benimaclet se da la oportunidad de llevar a cabo dicha conexión huerta – ciudad”. Además, aseguran que es una oportunidad perfecta aprovechando que València será Capital Verde Europea en 2024.
En este sentido, el alcalde de la ciudad, Joan Ribó (Compromís), también ha optado por no descartar por completo el proyecto de soterramiento, y plantearlo de cara a un futuro, ya que “es evidente que este año no tenemos recursos para desarrollarlo y, por supuesto, en la actualidad hay que acometer otras infraestructuras prioritarias para València, como el canal de acceso o el soterramiento de las vías de Serrería”.