Las obras del canal acceso ferroviario de València, que supondrán el soterramiento de las vías que dividen los barrios del sur de la ciudad, comenzarán durante el primer trimestre de 2023. Así lo ha anunciado la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo y Renovación Urbana, Sandra Gómez, después de la reunión mantenida con los responsables de ADIF. En este sentido, ha señalado que “el proceso de adjudicación está muy avanzado, lo que permitirá comenzar los trabajos de manera prácticamente inmediata”.
Gómez ha puesto de manifiesto la necesidad de esta reunión para “coordinar los diferentes servicios del Ayuntamiento de València. Se trata de la obra más importante que va a tener nuestra ciudad, con un impacto directo en muchos barrios y debemos garantizar el normal desarrollo de los servicios municipales”.
La inversión total de esta actuación tendrá un coste de 550 millones de euros, que estarán financiados por el Estado (50%), la Generalitat (25%) y el Ayuntamiento de València (25%). En este sentido, las tres administraciones han incorporado ya en los presupuestos de 2023 la inversión para esta actuación. Se prevé que las obras tendrán un plazo de ejecución de cinco años, y contemplan tanto el soterramiento de la playa de vías, como el derribo del puente de Giorgeta.
De esta manera, a medida que vayan avanzando las obras, se irá proyectando un corredor verde de 49.000 m² que unirá la zona sur de València. Aunque la urbanización de esta zona estará sujeta a un concurso de ideas, sí que se conocen algunos detalles, como la eliminación del tráfico de la zona apostando por unos accesos en bucle utilizando la calle San Vicente y la carretera de Malilla. Además, se revisará la reurbanización de la calle San Vicente, así como el PAI de Parque Central y San Marcelino.
Por último, la puesta en marcha de este proyecto también supondrá la remodelación de la estación Joaquín Sorolla. Esta estación necesita una actuación integral dado que en sus conexiones con el norte y el sur se ha estimado que circulen dentro de cinco años más del doble de viajeros: unos 8,7 millones de pasajeros anuales, frente a los 3,8 actuales.