El alcalde de València, Joan Ribó, ha defendido este viernes que el espacio que ocupa el edificio del hotel Sidi Saler, en el entorno del parque natural de la Devesa y la Albufera y cerrado desde hace once años, "vuelva a ser playa" y "naturaleza". Así, ha asegurado que el proyecto que tiene "clarísimo" el consistorio es que "sea una playa como era antes".
Ribó se ha pronunciado de este modo, en declaraciones a los medios de comunicación, después de que la concejala de Licencias de Actividad, Lucía Beamud, firmara este jueves la caducidad de la licencia ambiental del Sidi Saler, el antiguo hotel situado en la avenida de la Gola del Pujol en pleno parque natural de la Devesa.
Preguntado por este asunto tras participar en la presentación de nuevos agentes y vehículos de la Policía Local de València, el primer edil ha afirmado que "estaba enterado" de la firma que iba a realizar Beamud, que ese era un tema que "había hablado antes con ella" y que le había dado su "conformidad entusiasta".
Respecto a si el Ayuntamiento tiene algún proyecto para el edificio que albergaba el hotel, Joan Ribó ha aseverado que se tiene "un proyecto clarísimo" y ha precisado que este es "que sea una playa como era antes". "Está clarísimo, el objetivo es que sea parque natural", ha agregado.
Asimismo, sobre si el inmueble tendrá que ser derribado, el responsable municipal ha considerado que sí aunque ha matizado que "eso costará".
"Evidentemente eso costara", ha dicho, al tiempo que ha manifestado que frente "una cosa que en estos momentos no tiene licencia, una cosa que está fuera de ordenación en unos momentos en los que se están renovando los PRUG (Planes Rectores de Uso y Gestión) en un parque natural la solución lógica, natural y responsable desde un punto de vista medioambiental es que vuelva a ser playa".
Preguntado por si se va a impulsar algún tipo de iniciativa para el derribo, el alcalde ha aludido a la resolución firmada por Lucía Beamud. "Nosotros hemos hecho ya iniciativa importante en estos momentos que es la de que no se dé, que se retire la licencia. A partir de ahora hay que ver cómo trabajar en esa dirección", ha expuesto.
En este sentido, Ribó ha comentado que se quiere "estudiar con cuidado" todo esto y "hacerlo de una manera articulada con el PRUG de la Albufera". "Hay una serie de normativas. Queremos hacerlo de forma articulada. Nuestro deseo es que vuelva a ser playa, que vuelva a ser naturaleza", ha insistido.
"OBLIGACIÓN DE SUSPENDER LICENCIAS"
El edificio del hotel, como explicó la concejala de Licencias de Actividad, "se encuentra Fuera de Ordenación Sustantiva, lo que condiciona mucho las licencias que se le pueden otorgar desde la administración pública" y que son "las de obras de conservación y mantenimiento del edificio".
El inmueble está en el ámbito de los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y los Planes Rectores de Uso y Gestión (PRUG) de la Generalitat, ambos en revisión, por lo cual se aplica el régimen de protección preventiva de la Ley de Espacios Naturales Protegidos de la Generalitat.
Beamud precisó que eso significa que desde el Ayuntamiento se tiene "la obligación de suspender las licencias para los actos que hayan de dificultar o imposibilitar la consecución de los objetivos de la declaración de Espacio Natural Protegido".
"PROPIEDAD DEL ESTADO"
Por su parte, el vicealcalde y edil de Ecología Urbana, Sergi Campillo, se ha referido este viernes al Sidi Saler en la rueda de prensa que ha ofrecido sobre adecuación de áreas infantiles en València y ha destacado que "la propiedad es del Estado", por lo que ha dicho que "se está hablando de dominio público marítimo terrestre" y no de una propiedad municipal. Ha matizado que el inmueble no es una dotación pública y que se explotaba como hotel en régimen de concesión.
El también concejal de Devesa-Albufera ha precisado, preguntado por ese asunto y "ante una propuesta de reforma estructural para reabrir, después de once años, la actividad hotelera", que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de València ese hotel "está fuera de ordenación sustantiva". Así, ha reiterado que "solo se puede conceder licencia de mantenimiento y no de reforma estructural" y ha comentado que tras dos años sin actividad la licencia correspondiente "ha caducado".
"RESTAURACIÓN AMBIENTAL"
"Esto no es una voluntariedad del gobierno sino una aplicación de la norma", ha asegurado, además de subrayar que el edificio se encuentra "en una zona de especial protección" al construirse "encima de un cordón dunar que se destruyó en los años 70 y principios de los 80". Campillo ha considerado que "lo lógico es la restauración ambiental de esa zona natural".
"Como vicealcalde y como concejal de Devesa-Albufera lo que quiero es que se restaure", ha declarado, a la vez que ha dicho que "hay que preparar la costa ante los efectos del cambio climático". "Entendemos que hay que aplicar la normativa", ha añadido.
Preguntado por el futuro del edificio y por si podría albergar algún otro uso como un centro de mayores, Sergi Campillo ha apuntado que "no es descabellado" y que "es mejor de tener una dotación pública" que "lo que hay ahora", pero ha matizado que "cada cosa tiene su lugar" y ha opinado que ese "no es el lugar para hacer un centro de mayores". Ha insistido en que "no es lo más adecuado mantener una infraestructura que rompe el cordón dunar de la Devesa".