València busca aumentar la seguridad vial en sus calles. Para ello, un estudio realizado por la división de Seguridad Vial de la Policía Local ha propuesto una serie de iniciativas que ayudaría a reducir la siniestralidad en aquellos puntos conflictivos de la ciudad. Así, entre las medidas estaría la eliminación del ámbar en los semáforos de los giros de las grandes avenidas de València. Como ha explicado el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, “esta medida no tendría coste económico y reduciría la siniestralidad en un 70%”.
Así, las zonas de mayor siniestralidad de València se ubican en la periferia y son grandes avenidas. Este es el caso de Menorca con Baleares; Peset Aleixandre con Camino de Moncada; o la avenida Blasco Ibáñez que se alza como el punto más complicado de la ciudad para la seguridad vial, ya que en ella se han producido 89 heridos leves, 90 graves, 11 muy graves y 2 fallecidos.
Otra de las medidas que se proponen es cambiar la primera sanción de los conductores de patinetes u otros vehículos de movilidad personal (VMP) por un curso de seguridad vial, impartido por miembros de la Policía Local. En este sentido, Cano ha señalado que entre los puntos de mayor siniestralidad de patinetes están Guillén de Castro, Plaza de Saragossa con Avenida de Aragó, Paseo de la Albereda y Blasco Ibáñez. El 95% de los accidentes se saldan con daños leves.
El concejal, además, ha apuntado otras medidas como “el casco obligatorio para todos los conductores de VMP, así como el curso de formación, que es importante porque muchos usuarios no tienen ningún carnet y circulan por las vías sin ningún conocimiento previo”.
Y en esa misma línea, se ha anunciado que se creará una sección, dentro de la Unidad de Seguridad Vial, que se encargará de velar por la seguridad en los carriles bici. Además, se colocarán unas señales en las intersecciones de los carriles bici para avisar de que estos cruces deben rebasarse “a paso humano”.
Como ha destacado el concejal de Protección Ciudadana, “no se trata de perseguir a nadie, sino de aplicar actuaciones para intentar que todas las personas convivan, pero siempre teniendo claro los retos de la seguridad y la sostenibilidad, es decir, buscar tener cero víctimas y luchar contra el cambio climático”.
En València, el principal motivo de accidente de tráfico es la distracción, muy ligada al uso del móvil, que está detrás de 157 siniestros; seguido de la velocidad, los giros incorrectos y la invasión de la calzada por parte del peatón.
En lo referente a los tipos de vehículos, el estudio concluye que el turismo está detrás del 62% de los accidentes, la motocicleta el 10%, el patinete el 6%, el autobús y la bicicleta en el 4% y el peatón en el 3%. En cambio, si hablamos de los accidentes graves o muy graves, la motocicleta y ciclomotores están presentes en el 42%, el peatón en el 22%, la bicicleta en el 12%, el patinete en el 13% y los coches en tan solo el 5,41%.