En el suroeste de la ciudad, se encuentra el barrio de San Isidro, perteneciente al distrito de Patraix. Un barrio emblemático de Valencia que no solo cuenta con un amplio patrimonio festivo que lo hace único; sino que, en sus calles, se levanta la última alquería medieval del distrito. Un barrio que, desde hace años, lleva reivindicando mejoras que, poco a poco, están viendo la luz. Hablamos con José Luís Ceballos, presidente de la Asociación Vecinal de San Isidro sobre las principales necesidades del barrio y sus plazos de ejecución.
Sin duda, el proyecto estrella del barrio es el polideportivo. “Es una reivindicación que llevamos haciendo al Ayuntamiento de Valencia desde 2007. Es cierto que desde el anterior equipo de gobierno se impulsó este proyecto, pero cuando se iba a licitar, la empresa ganadora del concurso pidió al consistorio un sobrecoste de casi tres millones de euros que hizo que se paralizara todo el procedimiento”.
A partir de ese momento, desde la asociación vecinal aprovecharon para que se incorporara al proyecto del polideportivo una piscina, y así ha sido. Ahora, el proyecto ya está en fase de licitación y se espera que a finales de año (o principios del siguiente) se resuelva para que puedan comenzar las obras. “Estamos esperanzados. Tenemos el compromiso de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, y de la concejala de Deportes, Rocío Gil, que también está apoyando esta actuación”.
De hecho, como explicaba la misma concejala, “se trata de un proyecto de vital importancia para el barrio. Por ese motivo, y con el objetivo de que se ponga en marcha la ejecución de las obras con la mayor celeridad posible, se ha dotado ya este año al presupuesto municipal con 200.000 euros. Los 8.995.687,87 € restantes están ya previstos en los presupuestos para continuar con la realización de este polideportivo durante el siguiente año 2025”.
Pero, ¿cómo será el futuro polideportivo de San Isidro? Se ubicará en una parcela de 3.951 m2, entre las calles Arquitecte Segura de Lago y Mariano de Cavia, junto al retén de la 3ª Unidad de Policía Local del distrito de Patraix. El pabellón contará con dos plantas más un sótano y se conformará en un espacio polivalente capaz de albergar competiciones de alto nivel y otros eventos, mientras que la pista deportiva tendrá una capacidad de 233 asientos.
Asimismo, incluirá dos salas multideporte para fitness, spinning, así como una sala con rocódromos para escalada, una piscina climatizada, vestuarios tanto para deportistas como para árbitros y una zona exterior para actividades al aire libre y donde se han buscado los objetivos de durabilidad, facilidad de mantenimiento, eficiencia energética y reducción de emisiones contaminantes. De esta manera, entre sus principales características técnicas, podremos encontrar placas solares fotovoltaicas de autoconsumo, producción de calor basada en aerotermia, tratamiento avanzada de aguas de piscina, calefacción, ventilación y tratamiento de aire para vestuarios e iluminación tipo Led de máxima eficiencia para todos los espacios deportivos.
Reordenación del la calle Pau, Bien de Relevancia Local
Sin embargo, el polideportivo no es la única reivindicación histórica del barrio. Y es que, desde 2002, “estamos pendientes de que se apruebe un proyecto de reordenación de la calle Pau donde, previamente se había planteado un PAI, pero que, en 2002, la Conselleria de Cultura decidió que tenía que ser declarada Bien de Relevancia Local porque se trata de una calle en la que las casas son alquerías. Desde entonces, estamos esperando a que se apruebe una modificación del plan general, que reconduzca la edificabilidad para mantener las alquerías, y que permita llevar a cabo esta actuación en la calle Pau, que lleva asociada una serie de mejoras para el barrio”, señala Ceballos.
Y es que se crearía un espacio dotacional de 4.000 m² donde la Asociación Vecinal de San Isidro pide que se cree una plaza de barrio y un centro sociocultural que integraría el centro de Juventud, un Centro de Mayores – el actual está obsoleto, ya que tiene una capacidad para 200 personas y ya hay 800 inscritos – un pequeño auditorio y hasta un almacén festivo, “porque en San Isidro tenemos un importante patrimonio festivo, como los Gigantes o el Carró del Carbón y el Buzón Real que salen en la Cabalgata de Reyes".
Se trata, sin duda, de un espacio que mejoraría sustancialmente el día a día de los vecinos y vecinas del barrio porque, como explica José Luís Ceballos, “ni tenemos biblioteca, ni un espacio en condiciones para exposiciones o para los ensayos de la dos bandas de música que tiene el barrio”.
Además, en la misma zona de actuación, San Isidro sigue pendiente, por un lado, de la eliminación del cuello de botella de la calle José Andreu Alabarta, la principal salida del barrio; y por otro, de la apertura de la calle dels Gremis. Para ello, “hemos pedido al consistorio que solicite la cesión de acceso a la antigua estación de Vara de Quart, que está en desuso, para su desmantelamiento. De esta manera, sobre ese terreno cedido por Adif se podría abrir la calle”.
En este punto, el presidente de la Asociación Vecinal de San Isidro señala que “ya que la ciudad cede tanto terreno a Adif, ellos también pueden ceder un poco a la ciudad de Valencia para poder llevar a cabo este tipo de actuaciones tan necesarias para el barrio”. Y al hilo de esto, los vecinos reclaman también la creación de un túnel pasante, por debajo de las vías, que conecte el casco antiguo del barrio con la zona más próxima a la estación de metro.
A la espera de la renovación del CEIP Nicolau Primitiu
Por último, están a la espera de que Dirección General de Patrimonio dé por definitiva la ficha de protección de la Alquería de los Frailes, la última alquería medieval del distrito de Patraix, declarada Bien de Relevancia Local, para que la Conselleria de Educación pueda acometer la renovación del colegio Nicolau Primitiu. “Este proyecto ya estaba definido, pero se paralizó porque suponía un problema con el patrimonio de la alquería. Desde la asociación hemos ido trabajando con Conselleria para crear este proyecto que llegará hasta la línea de protección de la alquería. No entra dentro del Pla Edificant, y la Conselleria, cada año, destina presupuesto para su ejecución pero hasta que Patrimonio no dé luz verde, las obras no pueden empezar”, explica Ceballos.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Valencia ha llevado a cabo trabajos de mejora en el CEIP Nicolau Primitiu, como la reparación y pintura de las fachadas y del muro perimetral; así como actuaciones previstas que comenzarán en verano, y que contemplan la reparación e impermeabilización de la cornisa de uno de los edificios del colegio, la ejecución de un escalón en el cuarto del cuadro de luces o la mejora y adecuación de la puerta de acceso al centro, mejorando las condiciones de accesibilidad.