La suciedad y el incivismo volvió a imperar, un año más, en el centro histórico de la ciudad de Valencia durante la celebración de las Fallas. Una situación que denuncian desde la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico a través de un comunicado emitido en el día de ayer, 19 de marzo. “Las Fallas no pueden acabar siendo un reclamo para el botellón y dejando una ciudad en condiciones insalubres” y señalan que “venimos trasladando quejas año tras año y nos sentimos indefensos ante los abusos que se producen, con un incumplimiento reiterado de lo dispuesto en el bando fallero, ya bastante laxo al respecto”.
De esta manera, proponen que si la noche fallera implica la celebración de verbenas, se cree un espacio para tal fin. Así, ponen de manifiesto la importancia de contar con un ‘verbenódromo’ que esté “dotado de las infraestructuras necesarias” para que se puedan realizar estas verbenas o discomóviles “sin interferir en la vida ciudadana y donde el coste de la limpieza sea asumido por quienes se benefician, y no a cargo del erario público”.
Y es que aseguran que ya se ha demostrado que, durante las Fallas, no se ve afectada tan solo la zona en la que se celebra la verbena, sino que “las consecuencias negativas repercuten en todo el entorno”.
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Valencia anunció, después de que la puerta de la Lonja amaneciera con vómitos tras el primer fin de semana prefallas, que intensificaría el control y la protección del patrimonio histórico de la ciudad con vallas, pero también con sanciones de hasta 750 euros para los actos incívicos en estos espacios.
Sin embargo, la gran multitud de personas que se han concentrado en estas Fallas ha dificultado los trabajos. Por eso, desde la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de Valencia piden que “se replantee muy seriamente qué tipos de actividades se autorizan, en qué lugares y las dimensiones y altura de las instalaciones”.
Asimismo, ponen en foco en las churrerías que inundan Valencia durante estas fechas y reclaman que “se revise el bando fallero para ordenar estas instalaciones en espacios de alto valor patrimonial, cultural y paisajístico”.