Con la llegada del fin de agosto, comienza la Operación Retorno del verano, en la que se prevén que se realicen por las carreteras españolas un total de 4,9 millones de desplazamientos. Las carreteras y vías de la Comunitat Valenciana son las que más van a sufrir estos desplazamientos, ocupando el segundo puesto de España, por detrás de Madrid, con un 21% de los desplazamientos totales, es decir 1,02 millones de viajes.
Es por ello que las entradas a la ciudad de València se están viendo colapsadas por la gran cantidad de vehículos que vuelven a la capital del Turia al finalizar sus vacaciones. Concretamente, la A3 está registrando importantes restricciones, algunas debido a accidentes, en la entrada a València por la autovía A3 a su paso por Chiva.
Según la Dirección General de Tráfico (DGT), será durante el viernes 26 de agosto de 16:00 a 22:00 horas y el sábado 27 de 9:00 a 13:00 cuando se produzcan la mayor cantidad de desplazamientos por las carreteras, que se notará sobretodo en zonas turísticas y de descanso, tanto de costa como de montaña.
Alerta por lluvias y tormentas
Esta operación especial de tráfico por el retorno de las vacaciones de verano coincide con un aviso naranja por lluvias y tormentas intensas. Debido a esta situación excepcional, desde Seguridad y Emergencias se pide la mayor cautela durante estos desplazamientos, ya que los fenómenos climatológicos adversos requieren una mayor prudencia al volante para evitar accidentes.
El Centro de Coordinación de Emergencias recomienda programar un horario adecuado para el desplazamiento, evitando las horas más complicadas. En el caso de no haber otra alternativa, se recomienda circular moderando la velocidad, informarse sobre el estado de la carretera y posibles itinerarios alternativos, evitando pasos subterráneos.
Dispositivo especial
Debido a la gran cantidad de vehículos que se desplazarán por las carreteras valencianas durante este fin de semana, la DGT ha preparado un plan de medidas para facilitar la movilidad y fluidez del tráfico.
Algunas de las medidas son la instalación de carriles adicionales y reversibles en los momentos de mayor afluencia y en carreteras principales de acceso a las grandes ciudades, restricción de circulación de vehículos de mercancías peligrosas y camiones en general, o diseño de itinerarios alternativos evitando zonas centrales de tráfico.
A estas medidas se suman los medios humanos disponibles, como agentes de la Guardia Civil, patrullas de helicópteros y más de 13.000 personas para la atención de posibles emergencias. También se utilizaran los recursos materiales como radares fijos y móviles, helicópteros y drones, para velar por la seguridad en las carreteras.