La Concejalía de Movilidad Sostenible está invirtiendo en la seguridad de los niños y niñas de Valencia con la compra e instalación de barandillas de cristal que bordeen varias escuelas de la ciudad de Valencia. La petición de instalar estas barandillas la trasladaron los propios centros escolares y sus AMPA en reuniones que han mantenido con el regidor de Movilidad, Giuseppe Grezzi.
“Se trata de hacer más segura la entrada y, sobre todo, la salida de los y las escolares para evitar que bajen directamente a la calzada una vez suena el timbre del final de las clases a las escuelas. Los centros escolares donde se han instalado estos elementos están ubicados en calles muy transitadas, con lo cual aumentamos la seguridad de los peatones y, sobre todo, la de los estudiantes que a horas clave se concentran a las puertas de las mencionadas escuelas”, ha explicado Grezzi.
Esta semana han empezado ya los trabajos de instalación de 147 metros de barandilla de cristal en la avenida del Primat Reig, a la altura del colegio de Salesianos, en sustitución de una anterior que carecía de la suficiente protección, según apuntaron desde el centro al regidor de Movilidad Sostenible.
Pero esta no será la única actuación, puesto que hasta finales de noviembre están previstas medidas similares en la calle del Reverend Josep Noguera, a la altura del Colegio Público Sara Fernández, con una barandilla de catorce metros; también en el cruce entre las calles de San Vicent Màrtir y de la Pianista Empar Iturbi, donde se ubica la escuela Santo Ángel de la Guarda, con la instalación de una protección de dieciocho metros.
También en la calle de Marxalenes, a la altura del Colegio Mantellate, y en la calle del Doctor Moliner, donde está el Colegio Calasanz, con una barandilla de once y dieciocho metros de longitud respectivamente. Estas actuaciones se suman a otras que ya ha llevado adelante la Concejalía de Movilidad Sostenible en los entornos escolares de la ciudad en su plan para mejorar la seguridad de niños y niñas.
Así este verano, por ejemplo, se aumentaron los pasos de peatones y se mejoró su visibilidad, se limitó la velocidad a 30 km/h, se finalizaron aceras inacabadas y se ordenó el estacionamiento en el entorno del IES Cabanyal y de la calle Serpis con el propósito de mejorar la seguridad de los estudiantes en su camino al centro educativo y de hacer más seguro este espacio de la ciudad.