El descanso y el bienestar de los vecinos y vecinas de la ciudad de València se va a incrementar gracias a la nueva campaña impulsada por el Ayuntamiento de la capital del Turia. Y es que se van a instalar un total de 210 bancos en 18 de los 19 distritos de la ciudad.
Un nuevo mobiliario que estará listo antes de los días de Navidad y que, 30 de ellos, estarán en entornos escolares seguros.
Desde la Concejalía de Desarrollo y Renovación Urbana que dirige la vicealcaldesa y concejala, Sandra Gómez, se instalan cada año una amplia cantidad de nuevos bancos en distintas zonas, en respuesta a las peticiones del vecindario.
Concretamente, durante el ejercicio de 2021 se instalaron más de 200 bancos, y en esta nueva campaña se instalarán 210 en los próximos días. Una vez concluya esta campaña, se superarán los 5.000 bancos.
Fabricados con tapones reciclados
Los 30 bancos que se instalarán en zonas próximas a centros educativos son muy especiales, ya que contarán con un diseño multicolor que, además, tienen la particularidad de que están fabricados con tapones reciclados, con lo que se promueve también la sostenibilidad y el reciclaje en estos entornos educativos.
“Los bancos contribuyen a mejorar las zonas que rodean los centros educativos y a crear espacios de encuentro para las familias que acuden a los colegios a diario”, ha explicado Sandra Gómez.
“Esta nueva campaña da respuesta a la demanda vecinal y contribuye a que nuestros barrios sean más amables y accesibles, invitando en mayor medida a la convivencia vecinal en los espacios urbanos”, ha incidido la vicealcaldesa y concejala de Urbanismo.
100.000 euros de inversión
La inversión para llevar a cabo esta iniciativa de instalación de 210 nuevos bancos es de casi 100.000 euros (IVA incluido), con lo que se actuará en 18 de los 19 distritos de la ciudad. Entre ellos, en esta ocasión se instalarán más unidades en los de L’Olivereta, Benicalap, Jesús; y en los barrios de Benicalap, la Raïosa, el Cabanyal-Canyamelar, Orriols y la Fontsanta.
Los nuevos bancos permitirán crear nuevos espacios de descanso y convivencia para los vecinos y vecinas, especialmente para las personas con movilidad reducida o personas mayores. Están fabricados con materiales reciclados que imitan la madera, por lo que son más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, más resistentes y requieren menor mantenimiento.