El próximo martes, 7 de diciembre, se cumplen 25 años de la declaración de la Lonja de València como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Una fecha significativa que el Ayuntamiento de València quiere celebrar con una programación cultural que estará enfocada a poner en valor la historia de uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, que la propia concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Gloria Tello, ha definido como “la auténtica joya gótica de València”.
De esta manera, el sábado, 11 de diciembre, la programación arrancará con un concierto extraordinario a cargo de Capella de Ministrers, titulado “Bèsties i Profetes; Simbologia i Música a l’enteixinat del Consolat del Mar”, “una propuesta basada en la recuperación de composiciones vinculadas a la figuración presente en el artesonado de la Cambra Daurada de la antigua Casa de la Ciudad o algunas canciones anónimas del Corpus Christi, escritas en València entre 1387 y 1392, dos de ellas con referencias a poesías trobadorescas, así como canciones asociadas con el drama asuncionista de la Catedral de València”, ha detallado Tello.
Además, los días 13, 14 y 16 de diciembre será el turno de un ciclo de conferencias sobre ‘La Lonja y su entorno’ de la mano de Camila Mileto y Fernando Vegas de la Universidad Politécnica de València; ‘Los usos de la Lonja a lo largo de su historia’ a cargo de Mercedes Gómez-Ferrer de la Universitat de València; y ‘El techo de la Sala Dorada de la Casa de la Ciudad. Contexto y derivaciones’ por Arturo Zaragozá de la Academia de San Carlos.
Para completar la promoción y puesta en valor de este edificio, se está preparado, además, una ‘Maleta didáctica’ dirigida a alumnado de Primaria y Secundaria, sobre el origen del edificio, y la historia medieval valenciana, que tendrán que solicitar los centros educativos.
Asimismo, se presentará el libro de homenaje al centenario “La cámara Dorada: un universo de imágenes del Siglo XV valenciano en la Lonja de los Mercaderes”, y se contará con dos audiovisuales dedicados al conjunto de la Lonja y al artesonado del salón alto.
Finalmente, se ha elaborado una campaña de difusión, con carteles y elementos en formato de reclamo, para dar a conocer y hacer partícipe a la ciudadanía de la celebración.
El alcalde de València, Joan Ribó, que ha asistido a la presentación ha aprovechado para recordar que “hace falta velar, y en política, velar quiere decir invertir, en el mantenimiento y puesta en valor de los monumentos que son responsabilidad municipal, en este caso La Lonja, preservando el edificio y recuperando los tesoros que contiene, como se hizo con el pavimento gótico de la torre hace un tiempo, y como haremos ahora con el artesonado de la Cambra Daurada, que decora el techo del Consolat de Mar”.
“Una obra bella i costosa”
En cuanto a las iniciativas sobre el monumento en sí, la concejala ha señalado el proyecto sobre el artesonado original de la Cambra Daurada, uno de los conjuntos de madera cortada de época gótica más importantes de la Corona de Aragón, que fue trasladado hace un siglo aproximadamente gracias al esfuerzo del académico y archivero Luis Tramoyeres y del escultor José Aixa, lo cual aseguró su preservación. “Se trata de una obra de singular belleza, una pieza artística sin parangón en la ciudad, que encargaron los Jurados “de talla, or i de pintura” al maestro Joan del Poyo, una obra “bella i costosa”, que fue ejecutada entre 1418 y 1426.
Para poner en valor el artesonado, ha explicado Gloria Tello, hace falta un proyecto de intervención que determine su estado de conservación. “Y para ello, el punto de partida es la realización de un alzamiento fotogramétrico que ya está en proceso de elaboración”, ha anunciado la concejala, quien ha añadido que “a partir de la restitución fotogramétrica, se dispondrá de una sólida base de análisis, que podrá definir un plan de actuación, que desarrollaremos a lo largo de los años próximos”.
Esta iniciativa supone un nuevo hito en la serie de acciones de diferente carácter que la Concejalía de Cultura ha llevado a cabo en los últimos años sobre el monumento para mejorar su estado y su proyección (entre ellos, la dotación de un sistema antiincendios y ampliación de las cámaras de vigilancia; la restauración del pavimento gótico de la primera planta de la torre; o un estudio de conservación preventiva del monumento encargado al doctor arquitecto Javier Benlloch, profesor de la UPV).