El barrio de Jesús ya tiene uno de los referentes medioambientales más destacados de la ciudad. Esta plaza, que forma parte del proyecto de recuperación del espacio público ‘València, ciudad de plazas’, está abierta de nuevo al público como nuevo espacio seguro, esto es, un espacio abierto grande y amplio que permita a los usuarios respetar las medidas de distanciamiento decretadas por la pandemia del Covid-19. Durante las obras de la plaza del Pintor Segrelles, se ha utilizado una técnica especial basada en la "peatonalización blanda" que ya se ha utilizado en otras obras importantes, como en la plaza del Ayuntamiento, que ha permitido que se acelerase el proceso de pavimentación con motivo de proporcionar a la ciudad de más espacios seguros durante la emergencia sanitaria. Sandra Gómez, vicealcaldesa y regidora de Desarrollo Urbà, se ha desplazado hasta la plaza para ver los resultados de la reforma.
Esta obra ha permitido recuperar 1.800 metros cuadrados de espacio público en un entorno donde, además, hay un entramado importante de comercio local y restauración. La transformación de la plaza ofrece un amplio espacio que mejorará la calidad de vida de los vecinos y vecinas del barrio ya que podrán dispersarse fácilmente a lo largo del espacio para salvaguardar las distancias de seguridad, todo en un lugar donde antes solo había un aparcamiento de coches.
En cuanto a las obras, se ha ejecutado un proyecto denominado "provisional" que asciende a 40.000 euros. Concretamente, han reutilizado material mobiliario cedido por La Marina, que buscará una integración más natural con el entorno gracias a la instalación de jardineras y maceteros. En cuanto al pavimento blando es especial porque reduce la temperatura ambiente y mejora la sensación de confort. El asfalto negro absorbe la temperatura solar durante todo el día aumentando la sensación de calor. Sin embargo, con este pavimento de color claro se combatirán las olas de calor que cada vez son más frecuentes.
El proyecto ‘València ciudad de plazas’ en el que va incluido la reforma de la plaza del Pintor Segrelles, tiene como objetivo transformar la ciudad del Túria en favor del espacio público y de la creación de lugares de encuentro y disfrute ciudadano. Este proyecto pretende humanizar las vías públicas desde el reencuentro ciudadano, la movilidad sostenible, la ecología urbana, el paisaje y la infraestructura verde. Otras de las plazas intervenidas con este objetivo han sido la plaza del Ayuntamiento, San Agustín o la plaza de la Reina, que recientemente ha anunciado nuevos retrasos para su finalización. De hecho, en los últimos cinco años, los gobiernos de La Nau y del Rialto han recuperado 110.000 metros cuadrados de espacio público para peatones.
Sandra Gómez se ha desplazado personalmente hasta la plaza del Pintor Segrelles para observar el resultado de este nuevo punto de encuentro para el barrio. Como consecuencia de esta transformación, València contará con una plaza más sostenible, resiliente y adaptada a los efectos del cambio climático.