La movilidad está considerada una de las áreas clave dentro de un gobierno y es por ello que María José Catalá, la futura alcaldesa de València tras el triunfo del Partido Popular en las elecciones municipales del 28M, propuso durante la campaña electoral un plan en este aspecto con medidas orientadas a mejorar el transporte en la ciudad que ahora tendrá cuatro años para poder implementar.
Dos nuevas líneas de metro, mejorar la red de autobuses de la EMT, crear aparcamientos disuasorios y nuevas plazas de estacionamiento en los barrios de la ciudad. De este modo se podrían resumir las principales líneas del modelo de movilidad urbana que Catalá busca implantar en València. Unas decisiones en materia de movilidad que según confirmó la nueva alcaldesa irían acompañadas de un informe de seguridad que certificara su idoneidad para respetar al peatón y al resto de transportes que circulan por la ciudad.
Propuestas en EMT y Metrovalencia
En el caso de la Empresa Metropolitana de Transportes (EMT), la próxima alcaldesa avanzó el nombre de su próximo presidente: Jesús Carbonell, actual número dos de la Autoridad del Transporte Metropolitana de València, quien se prevé que también ostente el cargo de concejal de Movilidad en el nuevo consistorio popular. Así, junto a Carbonell, la primera edil buscará convertir a la EMT valenciana “en la mejor de España” apostando por reforzar el servicio de autobuses entre el centro, las pedanías de la ciudad como Castellar-l’Oliveral y también con los municipios del área metropolitana.
Mientras tanto, antes de su victoria en la pasada cita electoral, la dirigente anunció la creación de dos nuevas líneas de metro para la ciudad: en primer lugar, avanzar en la continuación de la Línea 10 desde la calle Alacant hasta Pont de Fusta: y en segundo lugar, una nueva línea de metro que una los barrios del norte y del sur de València con el centro y que se prevé que pase por los por los barrios de Benicalap, Torrefiel, Orriols y Ciutat Fallera.
Nuevos aparcamientos disuasorios y cambios en los carriles bici
Evitar el acceso de miles de coches al día al interior de València. Este es uno de los objetivos por los que María José Catalá anunció la creación de aparcamientos disuasorios en las entradas y salidas de la ciudad (y también junto a estaciones de transporte público) para fomentar el uso del autobús o el metro para llegar al centro de la ciudad. Además, dentro del programa de movilidad de Catalá, también se incluye la rehabilitación y reapertura de la zona de estacionamiento pública de la plaza Don Juan de Vilarrasa.
Una de las claves de la campaña de Catalá como candidata popular a la alcaldía fue la crítica de algunos carriles bici de la ciudad por la falta de seguridad de estos pasos de bicicletas o patinetes. Por esta razón, la nueva alcaldesa propuso el rediseño de algunos carriles bici de la ciudad para modificar algunos "tramos inseguros" de los situados en las vías de Fernando el Católico, Reino de València, Primado Reig o la calle Colón.