La ciudad de València cuenta desde la semana pasada con un nuevo sistema para la circulación y estacionamiento rápido de vehículos en las inmediaciones de la Estación Joaquín Sorolla. En concreto, el acceso a la entrada principal ha sido reordenado con el objetivo de mejorar la movilidad en esta área concurrida. Los cambios afectan a los carriles situados entre las puertas y la calle Francisco Largo Caballero, que han sido reorganizados para optimizar el flujo de tráfico y las operaciones de transporte público y privado.
Así, los cinco carriles más cercanos a la estación se han reservado exclusivamente para autobuses interurbanos y taxis. Tal y como ha explicado el Ayuntamiento en un comunicado, estos carriles permiten que tanto la carga como la descarga de pasajeros se realicen de manera más eficiente, evitando que vehículos particulares interfieran en las operaciones de transporte público. Además, se ha habilitado un vial para el cambio de sentido que es de uso exclusivo para autobuses interurbanos, permitiendo su salida y maniobra en un entorno donde anteriormente se producían congestiones debido al gran volumen de tráfico.
No es la primera intervención para mejorar la movilidad urbana en este enclave. De hecho, el pasado mes de julio se instalaron nuevas cámaras de control de tráfico y semáforos adicionales para facilitar la salida de taxis hacia las calles de San Vicente Mártir y Maestro Sosa, dos arterias clave en la red viaria de la ciudad de València. Estas acciones, junto con las implementadas ahora, son parte de un plan integral del Ayuntamiento que busca hacer “más eficiente” el flujo de tráfico, no solo para los residentes, sino también para los miles de pasajeros que diariamente transitan por la estación.
Un nuevo sistema "Kiss and Go" para agilizar la circulación
Uno de los elementos más destacados de la nueva reordenación es la creación de una zona "Kiss and Go", situada en el tramo más cercano a la calle Francisco Largo Caballero. Este espacio permite que los vehículos particulares se detengan de forma temporal para cargar o descargar pasajeros sin necesidad de estacionar. La finalidad de este sistema es reducir las paradas prolongadas y el estacionamiento indebido, uno de los principales factores que contribuyen a la congestión en la zona. Los conductores podrán hacer uso de este carril de espera de forma ágil y se les insta a utilizarlo el tiempo estrictamente necesario.
El "Kiss and Go" responde a la necesidad de ofrecer una solución para aquellos que necesitan dejar o recoger pasajeros rápidamente. Esta medida, sumada a la reserva de los otros carriles para transporte público, busca equilibrar el uso del espacio urbano entre los diferentes tipos de transporte, manteniendo fluida la circulación tanto para los particulares como para los servicios públicos.
Para aquellos que requieran más tiempo para estacionar, se han habilitado otras alternativas complementarias. En este caso, las plazas de estacionamiento regulado (zona azul) en la calle del Maestro Sosa permiten estancias más largas mediante el sistema de pago rotativo ORA. Además, el aparcamiento de Adif ofrece 15 minutos gratuitos, lo que resulta útil para quienes necesiten recoger pasajeros sin apresurarse.
Esfuerzo coordinado por mejorar la movilidad
Asimismo, con el fin de evitar el estacionamiento ilegal, especialmente en las aceras, se han instalado bolardos en las áreas peatonales. De la misma manera, se han destinado plazas de párking en calzada para motocicletas, promoviendo el uso de medios de transporte más sostenibles y reduciendo la presencia de motos mal estacionadas, que, según explican desde el consistorio, solían ocupar áreas no autorizadas y “dificultan el tránsito peatonal y el de otros vehículos”.
Estas acciones son el resultado de una colaboración "estrecha" entre el Ayuntamiento de Valencia y Adif, con el asesoramiento de la Policía Local y técnicos especializados en movilidad. El concejal de Seguridad y Movilidad, Jesús Carbonell, destaca que esta reorganización se enmarca en un plan más amplio para mejorar el tráfico en la ciudad. “Con esta nueva ordenación de la circulación y de las paradas, tanto del transporte público como de los vehículos particulares, se busca garantizar la fluidez en la llegada y la salida de pasajeros de la estación”, explica Carbonell.
En esta misma línea, el edil insiste en que la afluencia diaria de pasajeros, sumada a los servicios de taxis y autobuses interurbanos, hacía “necesaria” una reordenación. La Estación Joaquín Sorolla es un punto neurálgico para el transporte en Valencia, conectando la ciudad con múltiples destinos nacionales e internacionales a través de trenes de alta velocidad, larga y media distancia, así como el área metropolitana con Cercanías.