"Miedo, sentí mucho miedo", así relata Félix Sesay su "infierno" tras huir de Libia cuando tenia 21 años para buscar un futuro mejor.
Procedente de Sierra Leona, Félix Sesay huyó primero de su tierra natal y después de Libia a sus 21 años, en una lancha neumática buscando un futuro mejor. La lancha neumática en la que se embarcaron él y 106 personas más naufragó y de este modo, permaneció 28 horas en el agua hasta que el Aquarius les rescató. Sesay pisó Valencia por primera vez tiritando, "dando gracias a dios" pero contento, "porque sabía que estaba a salvo".
Cuando la lancha naufragó, pasamos mucho miedo y recuerdo el pánico cuando todos estábamos llorando. Después de 28 horas aguantando en el mar con los trozos de plástico de lo que quedaba de la lancha, con la ayuda de Dios, vimos venir un helicóptero que nos vio y des de el que nos hablaron para que mantuviéramos la calma. Ellos dieron aviso al Aquarius y nos rescataron a todos con vida, sentí un gran alivio y mucha felicidad, como si estuviera en el cielo. Félix SesayTras aprender el idioma y haber pasado por el Sistema de Protección Internacional del Gobierno, ahora Félix vive en Torrent, y aunque ha trabajado ya en varios puestos, se ha quedado sin trabajo.
Su vocación es la sanidad, la medicina. De hecho, ya trabajó en la Cruz Roja de Sierra Leona como sanitario en la emergencia del ébola durante 2014 y 2015, en el apogeo de este virus, por lo que su afán social y de ayuda caritativa le viene de lejos, lo lleva en el ADN. En Sierra Leona vivía junto a sus padres y sus seis hermanos, "pero tras un episodio de lluvias torrenciales mi padre murió y la farmacia que tenían quedó destrozada", explica Félix.
Lo perdimos todo, por eso decidí irme a Libia, donde trabajé como enfermero en un hospital. Félix Sesay
A su llegada a Valencia tuvo un intenso contacto con Cruz Roja, ya que participó en la Operación Esperanza del Mediterráneo, incluso llegó a reunirse con miembros del equipo de la ERU de Salud de Cruz Roja Española que había acudido a Sierra Leona para el montaje de los Centros de tratamiento del ébola. Tras unos años de integración en nuestro país, finalmente ha acudido a Cruz Roja Española, a la sede más próxima donde reside, Torrent, puesto que al encontrarse desempleado y no tener la homologación de sus títulos como sanitario, se siente impotente de no poder ayudar en esta crisis de la COVID-19. De este modo, se ha incorporado en la sede de Torrent de Cruz Roja Española, y allí participa en numerosas tareas vinculadas al Plan Cruz Roja Responde y así, colabora en el almacén de alimentos y hasta entrega alimentos del programa Menjar a casa del Ayuntamiento de Torrent, así como en cuantas tareas van surgiendo con gran disponibilidad y entrega.
Pocas son las palabras las que me salían al hablar con Sesay, al contrario de las lagrimas, que caían como si de una fuente se tratara. Miedo, futuro y ayuda, son las palabras que mas repite el protagonista, y es que si por una cosa cabe destacar al natural de Sierra Leona es por su valentía y su afán de superación, pero también por su alma caritativa que le mueve por ayudar a toda la gente. Valentía y superación, esta es la historia de Félix Sesay, la que gracias a su testimonio de primera mano València Extra les ofrece.