El mismo Hemiciclo en el que hace ahora 80 años, cuando Valencia fue capital de la República, se reunieron las cortes españolas en dos ocasiones, el alcalde Joan Ribó ha dado la bienvenida a los asistentes al Homenaje al Magisterio Republicano, dentro de las actividades programadas en el marco de las XXII Jornadas Internacionales de Historia de la Educación “Educar en tiempos de guerra”, organizadas por la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universitat de València. Además de la vicepresidenta del Consejo, Mónica Oltra, y la consellera de Agricultura y Medio Ambiente, Elena Cebrián, han asistido al acto los concejales Sergi Campillo, Fernando Giner, Roberto Jaramillo, Maite Giráis, Jordi Peris y Narciso Estellés
“Ellos y ellas formaban parte de un cuerpo docente con una formación previa reglada que por primera vez se les exigía a las y los maestros, y empezaban a formar parte de una red de centros que poco a poco se extendió por todo el Estado, incluso a las olvidadas zonas rurales”, ha afirmado Joan Ribo al referirse a maestras y maestros como Guillermina Medrano, Adelardo Sanchis, Higinio Martínez, Ángeles Soriano o José Uribe, “que además de maestro fue diputado de las Cortes republicanas”
Ribó ha recordado el papel que en aquel difícil momento histórico tuvo la institución Libre de Enseñanza, “que fue la columna vertebral del nuevo sistema de enseñanza, y la innovación se hizo realidad de la mano de personas como ellas que, después, se vieron obligadas a dejar atrás todo lo que tenían, sus familiares y amistades, y también todos aquellos sueños forjados durante aquellos años de la República”.
El alcalde ha recordado que él ha sido profesor durante muchos años “y siempre me han hablado de los maestros de la República, de la gran tarea que hizo la República en el ámbito educativo. Hemos visto en algunos lugares cómo cuando llegó el franquismo después de la barbarie de la guerra, cerraban institutos y escuelas. Creo que la tarea de la enseñanza en aquel tiempo fue muy global y muy completa; la primera vez que se planteó enseñar seriamente a todas las personas. Es un legado a recordar en un momento en que la enseñanza tiene muchas limitaciones, y creo que el esfuerzo que hizo la República es algo a repetir para salir del agujero en el cual estamos”
En su intervención en este emotivo homenaje a los enseñantes republicanos, Ribó ha dicho que Santo Domingo, Estados Unidos o México fueron algunos de los lugares en los que debieron exiliarse algunos de estos maestros, aunque algunos, como Higinio Martínez, no tuvieron tanta suerte y fueron condenados a 30 años de cárcel.
“Hoy reconocemos la gran labor de los maestros y las maestras que ejercieron durante la Segunda República, aquellos que participaron en las misiones pedagógicas, los que se implicaron en la educación de los niños… y que después acabaron apartados durante años de la profesión de enseñantes”, ha manifestado Ribó, que ha felicitado a la Universidad de Valencia por su trabajo y esfuerzo para recuperar y difundir la memoria y el patrimonio histórico de la escuela republicana. “Con vuestros trabajos nos mostráis a la sociedad los avances de aquellos tiempos y de las personas protagonistas que los protagonizaron. Es muy importante comprender esta etapa histórica y no dejar de lado la recuperación patrimonial del legado de aquellas mujeres y hombres”
También la vicepresidenta del Consejo, Mónica Oltra, ha valorado este homenaje: “La historia a veces nos empuja adelante y a veces atrás. En la República, cuando Valencia además fue capital de España, fue un tiempo que nos empujó adelante. La enseñanza universal, que llega a todos independientemente de la situación económica, tiene su embrión en ese momento histórico y se trunca con el golpe de estado, con la guerra civil, con la dictadura. Quiero hacer un paralelismo de cómo hemos heredado una enseñanza que entronca en aquel tiempo, y no tenemos que olvidar nunca que lo importando es lo que pasa dentro del aula. Es lo que nos enseñaron los maestros de la República, que lo verdaderamente importante es lo que pasaba dentro del aula, el conocimiento que se transmitía pero también los valores que nos hacen personas libres, la educación como herramienta para que los niños y niñas sean adultos libres a los que nadie pueda ni engañar ni tiranizar”