Una de las consecuencias más graves de la invasión militar rusa en Ucrania está siendo el éxodo de personas hacia otros países. En concreto, ya son más de 3,5 millones las personas ucranianas que han visto cómo la vida que conocían en su país de origen se ha truncado. España ha sido uno de los países que ya ha acogido en torno a 25.000 de estos refugiados y a la Comunitat Valenciana han llegado hasta el momento 1800 personas.
De los casi cuatro millones de refugiados que contabilizan las organizaciones humanitarias, cerca de un millón son niños y niñas que junto a sus madres, han huido de la guerra y deben empezar una nueva vida fuera de su Ucrania natal. Su adaptación a España pasa también por ser escolarizados en un centro educativo y para garantizar este proceso, la Conselleria de Educación, encabezada por Vicent Marzà, ha creado un documento para preparar su acogida.
Aunque ya había un protocolo que hacía referencia a la acogida del alumnado desplazado y que databa del año 2018, se ha creado este nuevo reglamento que incluye unas pautas específicas de “acompañamiento educativo y emocional” centrado en aquellos menores que llegan desde países inmersos en conflictos bélicos, como es el caso actual de Ucrania.
El idioma como barrera principal
El aprendizaje de una nueva lengua como el castellano es una de los grandes obstáculos a los que debe enfrentarse uno de estos niños o niñas provenientes de Ucrania. Por ello, desde Educación, se recomienda adaptar el ritmo, repetir los mensajes tantas veces como sea necesario o simplificar al máximo el vocabulario con el objetivo de facilitar la comunicación oral.
Además, se primará la comunicación escrita y las fotos, pictogramas o dibujos serán unas de las herramientas más útiles de interacción sobre todo en las fases más iniciales. Asimismo, instrumentos como traductores en línea serán de gran utilidad para favorecer la comunicación.
Por otro lado, el departamento que dirige Vicent Marzà, en colaboración con la Dirección General de Política Lingüística y Gestión del Multilingüismo, también ha creado un Programa de acogida lingüística al pueblo ucraniano en el que se incluye una guía de conversación con expresiones y vocabulario de uso cotidiano en valenciano, castellano, ucraniano ruso e inglés.
Aspectos emocionales y académicos
En el terreno emocional, la proximidad y empatía “por las circunstancias que están viviendo” las personas desplazadas de Ucrania serán clave, sobre todo durante las primeras semanas y meses, detalla el documento.
Además, al principio también se les deberá prestar especial atención, tanto al alumnado como a sus familias debido al “choque” que han sufrido tras abandonar su país y dar prioridad al bienestar emocional de los menores refugiados frente a cuestiones académicas.
Por este motivo, se podrá asignar en los centros educativos unos alumnos, que sean originarios de Ucrania o migrantes que ya lleven una temporada residiendo en la Comunitat Valenciana. para facilitar la adaptación de estos menores tanto a nivel emocional como académico.
Así, el nuevo protocolo de acogida específico también detalla que, del mismo modo que los alumnos que se presenten voluntarios, también habrá profesores que atiendan y resuelvan aquellas dudas que puedan surgirle al estudiantado ucraniano y a sus familias a través de tutorías y reuniones periódicas en el centro escolar.