La parada de metro de Colón tendrá dos nuevos ascensores para unir la calle, el vestíbulo y el andén para aumentar la capacidad y el servicio de esta estación de Metrovalencia y solucionar los problemas de accesibilidad para las personas con movilidad reducida. Además, este proyecto de mejora también incluye la sustitución de los tramos inferiores de las cuatro escaleras mecánicas que desembarcan en el andén central de la estación.
En un primer paso, la Generalitat, a través de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), ha licitado la redacción del proyecto y la ejecución de las obras necesarias para duplicar los ascensores que realizan el recorrido calle-vestíbulo y vestíbulo-andén de la estación. Así, como resultado de estos trabajos de mejora de esta infraestructura ferroviaria, la parada de Colón pasará a tener cuatro ascensores, dos más de los que existen en la actualidad: dos de ellos conectarán la calle y el vestíbulo; y los otros dos unirán el vestíbulo con el andén.
El presupuesto inicial es de 4,36 millones de euros, IVA incluido, y el plazo es de dos meses para la redacción del proyecto y cinco meses para la ejecución del mismo. Los trabajos estarán financiados por la Unión Europea, según ha informado la Generalitat en un comunicado. En ese sentido, tal y como ha confirmado la administración autonómica, estos trabajos no obligarán a cerrar la estación durante su ejecución, ya que se desarrollarán mediante técnicas e la metodología Building Information Modelling (BIM). De esta manera, esta tecnología servirá para detectar interferencias y garantizará el uso de la estación por parte de los usuarios en todas las fases de la ejecución de las obras.
El principal objetivo de los trabajos es aumentar la accesibilidad a la estación, ya que solo hay dos ascensores para la bajada y subida de viajeros de las cuatro líneas lo que provoca la acumulación de personas en el andén central. Al existir un único ascensor para salvar cada uno de los desniveles (uno para el trayecto calle-vestíbulo y otro para el vestíbulo-andén), solo es posible realizar un movimiento a la vez para hacer cada recorrido, lo que penaliza la capacidad de uso de los mismos y genera un problema de accesibilidad para personas con movilidad reducida en las ocasiones en las que alguno de ellos sufre una avería.
Cambios en las escaleras mecánicas de la estación
En el mismo proyecto, pero en fases distintas, se ha planteado modificar los tramos inferiores de las cuatro escaleras mecánicas que descienden al andén central, retranqueándolas para que desembarquen a los usuarios más cerca de las salidas de emergencia, en los extremos del andén. De este modo, se permite un mayor aprovechamiento de la superficie del mismo, ya que los viajeros se concentran en la zona central.