El fin de la pandemia de la covid-19 se encuentra hoy un poco más cerca. El Consejo de Ministros aprobará el próximo 19 de abril el fin del uso de la mascarilla en interiores. De esta manera lo anunció ayer la ministra de Sanidad, Carolina Darias, durante el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que se ha celebrado en Toledo.
Por ello, el fin de la obligatoriedad de la mascarilla en espacios interiores será una realidad a partir del día 20 de abril, cuando la medida entre en vigor en el Boletín Oficial del Estado (BOE). "Gracias a los altísimos niveles de inmunización que tiene la población, la situación epidemiológica es actualmente favorable", ha explicado la ministra.
Sin embargo, según ha señalado el departamento de Sanidad, existen dos circunstancias en las que el uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio. Por un lado, en los medios de transporte público como son el metro, tren, tranvía o autobús.
Y, por otro lado, los trabajadores y visitantes de centros asistenciales como residencias deberán seguir llevándola; así como las personas que estén ingresadas cuando se encuentren en espacios compartidos fuera de su habitación y en centros sanitarios como los hospitales seguirá siendo obligatoria.
Informe de Sanidad
Así, estas excepciones son las que aparecen detalladas en el último informe de Sanidad titulado ‘Posicionamiento de la Ponencia de Alertas, Planes de Preparación y Respuesta sobre el uso de mascarillas en espacios interiores’. Un documento donde también se desaconseja el uso de la mascarilla entre el alumnado de los centros escolares.
Además, en el mismo informe también se expone que en el ámbito profesional es recomendable su uso cuando en el trabajo no se pueda garantizar la distancia de seguridad de 1,5 metros ni haya una ventilación adecuada en el espacio donde se desarrolla la actividad laboral.
En la misma línea, el informe de Sanidad también recomienda utilizar la mascarilla en espacios públicos que sean cerrados como los comercios; lugares donde las personas permanecen tiempo sin comer ni beber como cines, teatros, salas de conciertos y museos; y, en el interior de otros establecimientos como bares, restaurantes y locales de ocio nocturno mientras no se coma ni beba.