Joaquín Sorolla volverá a tener un monumento homenaje en la ciudad de València gracias a la reconstrucción de la estructura, obra de Mariano Benlliure, que se instaló en 1933 en la playa del Cabanyal y que fue destruida por la riada que asoló la capital valenciana en el año 1957. Así, el Ayuntamiento de València ya ha iniciado los trámites para la recuperación de esta figura en homenaje al conocido como pintor de la luz que se reconstruirá usando las mismas piezas que formaban parte de la estructura original del siglo XIX.
Este proyecto surgió en el año 2023 cuando la Delegación de Acción Cultural, Patrimonio y Recursos Culturales encargó al Servicio de Investigación Arqueológica Municipal (SIAM) la elaboración de los estudios previos para la reconstrucción del monumento. A partir de ahí, se inició un proceso de búsqueda de las piezas que integraban el monumento creado por Benlliure y que dio como resultado el hallazgo de restos de este en el cementerio viejo de Paiporta, en el tramo VII del Jardín del Turia, en el antiguo matadero de Borbotó y también en el solar que Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) posee en San Isidro.
De hecho, en este último emplazamiento es donde más piezas se han encontrado, entre 55 y 60, que han sido incorporadas al catálogo. La alcaldesa María José Catalá visitó ayer, junto al concejal de Cultura, José Luis Moreno, el depósito de FGV donde se encuentran los restos para conocer en qué punto se encuentra el proceso de volver a materializar el monumento a Sorolla.
“Esta actuación es fruto de un proceso riguroso y respetuoso con la obra original y supone cumplir la voluntad del artista y resarcir así una deuda histórica”, señaló la alcaldesa. “Se trata de una de las iniciativas culturales más destacadas en las que estamos trabajando, queremos devolver el monumento, actualmente descontextualizado, al lugar que inspiró sus espléndidas escenas de playa”, añadió.
Un objetivo que podrá ser cumplido gracias a que el SIAM ha podido acreditar que, al menos, el 60 % de las piezas encontrados son auténticas y están en buen estado, lo que permite devolver a la vida esta escultura mediante la anastilosis, es decir, la reconstrucción por medio de la reunión de partes o fragmentos dispersos. De esta forma, cuando finalicen los trabajos de inventario y catalogación, así como las consultas previas con el resto de servicios y administraciones públicas implicadas, se redactará el proyecto básico, que, una vez autorizado, dará paso a la contratación de la redacción del proyecto técnico de reconstrucción y, posteriormente, a la ejecución del mismo.
“En la playa, junto al mar latino”
Aunque el área de Cultura del consistorio municipal ya ha confirmado la viabilidad de volver a construir este gran monumento más de medio siglo después de que fuera arrasado, su ubicación todavía es una incógnita sin resolver. “En la playa, junto al mar latino que tantas obras me inspiró y donde pasé los mejores días de mi vida”: estas fueron una de las declaraciones que hizo Sorolla años antes de su fallecimiento respondiendo sobre dónde le gustaría que se ubicara el busto en bronce, realizado también por Mariano Benlliure, que coronaba este monumento.
Es por ello que desde el servicio de Patrimonio Histórico y Artístico se baraja la playa del Cabanyal como la ubicación preferente para recolocar esta figura. Sin embargo, la decisión no depende únicamente de la administración local, sino que debe contar con el visto bueno de otras entidades como los departamentos de planeamiento, medio ambiente, paisaje y también la Dirección General de Costas para poder iniciar el proceso de ‘resucitar’ esta pieza arquitectónica.
Ahora, tal y como explicó el pasado mes de junio Marta Pastor García, jefa del servicio, “se están haciendo las gestiones y consultas necesarias con el resto de administraciones públicas para poder determinar la ubicación exacta en la que llevar a cabo la reconstrucción”. Entre las posibilidades que se encuentran sobre la mesa está el paseo marítimo, en la propia arena de la playa o en alguna de las calles del entorno de este arenal valenciano.
Un proyecto para reconstruir la Portada de Goerlich
El depósito de San Isidro propiedad de FGV es también el lugar donde se encuentran restos de la antigua Portada de Goerligh, un monumento coetáneo al de Sorolla, ya que se alzó también en 1933 y estuvo en pie hasta 1961 y que se erigía en el centro de la emblemática de la plaza del Ayuntamiento.
Así, este monumento ya desaparecido, pero que durante tres décadas fue postal de la ciudad de València, también será protagonista de un proceso de reconstrucción que el Ayuntamiento prevé acometer. De hecho, el consistorio ya ha encargado un estudio cuyo resultado ha determinado que es posible la reconstrucción parcial del pórtico circular del mercado de las flores, uno de los elementos icónicos del monumento.
En este sentido, tanto el número de restos hallados como su estado de conservación hacen factible reconstruir uno de los elementos más reconocibles del conjunto arquitectónico, obra de Javier Goerlich. “Estos trabajos permiten recuperar una parte de la historia de València, vinculada a dos de nuestros artistas más importantes y a la persona considerada ‘artífice de la València moderna’”, apuntó la alcaldesa durante la visita.