La alcaldesa de València, María José Catalá, se ha mostrado "muy satisfecha" con el transcurso de las Fallas 2024, que han sido "muy exigentes" desde el punto de vista de la organización porque la ciudad ha recibido "cerca de un millón" de visitantes.
Así se ha pronunciado desde el Ayuntamiento, en declaraciones a los medios, antes de presenciar la última 'mascletà' de las Fallas, a cargo de la pirotecnia Mediterráneo, este martes.
"Estamos muy contentos en el Ayuntamiento de València de cómo han ido estas fallas, muy satisfechos de nuestras apuestas por la limpieza, por la seguridad. Hemos detectado, evidentemente, cuestiones que analizaremos y que intentaremos mejorar, pero la verdad es que yo creo que es un día importante porque es un día en el que rematemos el trabajo y el esfuerzo de todo un año", ha señalado la alcaldesa.
Catalá ha destacado que los falleros y las comisiones han sido unos "aliados inmejorables" que "han ayudado muchísimo a que la situación de la ciudad, en unas Fallas que han coincidido en fin de semana, no se descontrolara en exceso". En concreto, ha reconocido su responsabilidad para evitar el consumo de alcohol entre menores y mantener la limpieza en el entorno de las carpas y monumentos, junto a sus avisos a la Policía Local cuando hay situaciones de inseguridad.
A falta de los datos finales que se presentarán esta semana, la alcaldesa ha indicado que "han sido unas fallas muy exigentes" con "cerca de un millón de personas han venido a la ciudad de València" y "eso ha comportado una necesidad de refuerzo de un 71% en el personal de limpieza, de un 40% en la maquinaria de limpieza".
También ha señalado el buen funcionamiento de la puesta en marcha de la unidad rápida de atención ante situaciones como el botellón y ha agradecido el largo trabajo de la Policía Local.
Preguntada por qué aspectos deben mejorar el año que viene, la alcaldesa ha explicado que una de las cuestiones que "más le preocupan" es "la presencia de un material explosivo que está introduciéndose en los últimos dos años en la ciudad" por parte de personas de turistas, "que no está controlado" y "ha originado unos problemas en la zona del río".
"Voy a abordar conjuntamente con el resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado cómo reforzar el control de ese material, que evidentemente no se vende de forma legal" y "supone un riesgo para las personas", ha dicho, antes de recalcar que no se refiere a los falleros sino a "personas que vienen de fuera y vienen con un material que además no se vende legalmente y que debemos controlar mucho".
Catalá ha señalado que se revisará cómo se han aplicado las ordenanzas para atajar el "incivismo" de "personas que han atacado el patrimonio o la ciudad". "Esta ciudad tiene que comenzar a aplicar una mano dura contra el incívico", ha asegurado, antes de añadir que, "si queremos que las Fallas sean como son y como deben de ser, tenemos que aplicar las máximas sanciones" y "ser muy contundentes en la utilización del material de pirotecnia".
Catalá "desea y espera" que la noche y la tarde sean "tranquilas" y ha puesto en valor la labor que realizarán los bomberos municipales durante la 'cremà', tras unos días en los que "no les hemos dejado casi ni descansar".
Por otro lado, la alcaldesa ha afirmado que los retrasos ocurridos en el primer día de la Ofrenda de las Fallas 2024 se debieron a que es "un año récord" de participación, con 60.000 falleros y un 60% del censo fallero desfilando esa jornada. Ha destacado que este lunes "ya no se produjeron" este retraso y pudo culminarse la Ofrenda "en el tiempo que nos habíamos fijado".