Día histórico para la Marina de València. Ayer, el Consejo Rector del Consorcio Valencia 2007 acordaba la liquidación del organismo y constituía una comisión de disolución integrada por el Ayuntamiento de València y la Generalitat Valenciana, dejando abierta la posible incorporación de una representación del Estado. Una acción que ha podido realizarse tras la condonación de la deuda por parte del Ejecutivo central.
Y es que como ha destacado la vicealcaldesa de la ciudad, Sandra Gómez, “el consorcio se creó para gestionar la monstruosa deuda que nos dejó en herencia el Partido Popular y que era una losa que impedía avanzar a la Marina. Ahora, el futuro pasa por una sociedad entre Ayuntamiento y Generalitat que permita sacar todo el potencial de la Marina”.
Por su parte, el alcalde de València, Joan Ribó, ha afirmado que “el Ayuntamiento garantizará la continuidad de la actividad empresarial de la Marina mientras dure todo el proceso”. En este sentido, ha avanzado que, hoy mismo, pedirá una reunión con el presidente de la Autoridad Portuaria, Aurelio Martínez, para “estudiar los cauces de colaboración”. En estos momentos, el consistorio gestiona toda la zona Norte, pero es necesario un “trabajo en común para mantener la actividad por los y las trabajadoras, las empresas y los miles de visitantes que recibe”.
Cabe destacar que, el año pasado, pese a estar marcado por la pandemia de la COVID-19, por la Marina de València pasaron más de 4 millones de personas, entre locales y turistas, mientras que en los años anteriores, esta cifra llegó a alcanzar los 7 millones de personas. “Se trata del polo de innovación más importante que tiene la ciudad de València, junto a las universidades y Las Naves. Por eso, es estratégico que el trabajo que se está realizando en la Marina continúe y se desarrolle”.
Y mientras el Ayuntamiento de València trabajará por la continuidad de la actividad del espacio, la Generalitat ya estudia la posibilidad de convertir la Marina en un puerto de la red autonómica. Como ya explicado la consellera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Rebeca Torró, “cumple con todos los requisitos, ya que tiene una bocana de acceso propio y está completamente separada de la actividad comercial que se desarrolla en ValenciaPort”.
Después de que en marzo de 2021, el Gobierno de España anunciara el pago del préstamo ICO solicitado por el Consorcio para acometer las obras necesarias en la ciudad con motivo de la celebración de las regatas por valor de más de 300 millones de euros, tal y como había solicitado la Generalitat en reiteradas ocasiones, el pasado 31 de diciembre, el Consell abonaba a la Marina de València el pago de los 12 millones de euros correspondientes a la anualidad 2021 que le corresponden a la Administración autonómica para cancelar la última deuda pendiente del Consorcio València 2007.
Con este pago, realizado también por parte de la Administración central (12 millones de euros) y el Ayuntamiento de València (6 millones de euros) se iniciaba el proceso para cancelar el conjunto de la deuda que mantenía activo el Consorcio València 2007 con el Tesoro Público desde la celebración de la 32º Copa América, y que ascendía a cerca de 400 millones de euros. Un proceso de disolución del organismo que, finalmente, se ha materializado.