Una de las noticias más importantes del año en València llega, precisamente, a pocos días de finalizar 2023. Este jueves, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, confirmaba el compromiso del Gobierno con la ampliación de la terminal norte del Puerto de València. El próximo martes 19 de diciembre el Consejo de Ministros autorizará licitar por más de 656 millones de euros las obras que implicarán la construcción de una nueva terminal pública de contenedores. Pero, ¿qué supone la ampliación del Puerto de València?
La ampliación es un proyecto considerado de interés general que se desarrollará en colaboración público-privada y que, en total, superará los 1.600 millones de euros de inversión, lo que supone la mayor inversión privada de la historia del sistema portuario español. En este sentido, la Autoridad Portuaria construirá la infraestructura básica (dragado, muelle y relleno consolidado), mientras que la empresa privada MSC se encargará de la superestructura, instalaciones y material móvil.
Con ello, València dispondrá de una nueva terminal pública altamente competitiva en el transporte marítimo de contenedores a nivel estatal e internacional. Esta infraestructura permitirá operar a los buques de última generación MEGAMAX, de hasta 430 metros de eslora y más de 24.000 TEUs (contenedores equivalentes de 20 pies).
El Puerto de València, en cifras
La ampliación busca encauzar el futuro del puerto, que ya opera cerca de su punto de saturación, según insisten desde el propio Gobierno, para responder al crecimiento de la actividad y seguir siendo una infraestructura de referencia dentro del tráfico mundial de contenedores.
Actualmente, el Puerto de València es considerado el primer puerto de España y del Mediterráneo, el cuarto de la Unión Europea y el número 20 del mundo en tráfico de contenedores TEUs. Por ello, destaca como un polo de distribución de mercancías clave en la competitividad de las empresas y del tejido productivo estatal, sirviendo de entrada del 50% del PIB de España.
Los datos reflejan que, actualmente, el Puerto de Valencia genera un movimiento de más de 2,6 millones de TEUs operados en importación y exportación, canalizando el 40% del comercio exterior español de mercancía general en contenedor. Del total de contenedores, el tráfico ferroviario supone algo más de 200.000 TEUs, más de 4.000 trenes, un 8% del total de las operaciones del puerto.
¿Proyecto sostenible?
Sin embargo, la ampliación de la terminal norte del Puerto de València se ha encontrado con una férrea oposición ciudadana y política, representada por la Comissió Ciutat Port y por Compromís, ya que se considera que la infraestructura supone una sentencia de muerte para la Albufera con consecuencias para la salud, medioambientales y legales.
Desde el Gobierno central aseguran que el proyecto se ha concebido y diseñado bajo unos “estrictos criterios de respeto medioambiental” que incluyen su total electrificación, con operativa autosuficiente y origen 100% renovable.
Además, se impulsarán las conexiones ferroportuarias para potenciar el transporte ferroviario de mercancías, facilitando la salida de vehículos pesados de la carretera, descongestionando la V-30, y el área metropolitana de València.
Concretamente, la terminal norte lleva aparejada la mayor terminal ferroviaria de Europa, que permitirá trasvasar al tren el tráfico terrestre de mercancías (actualmente se realiza en un 93% con camiones). Según el proyecto, la ampliación norte contará con una red de vías de carga y descarga que será la mayor terminal ferroviaria construida hasta la fecha en un puerto español y, con ella, multiplicará por cuatro su capacidad actual, uniéndose a las ampliaciones de las terminales internas de la infraestructura.