El alcalde de València, Joan Ribó, ha asegurado que “hoy es un gran día” después del acuerdo con el Gobierno para que el plan de cuenca de la Confederación Hidrográfica del Júcar 2022-2027 incluya por primera vez una aportación hídrica suplementaria de 60 hectómetros cúbicos para el lago de la Albufera. El alcalde, acompañado del vicealcalde, Sergi Campillo, se ha reunido con la consellera de Transición Ecológica, Mireia Mollà, y la secretaria autonómica de Emergencia Climática, Paula Tuzón, “que ha sido fruto de un largo proceso de diálogo entre las instituciones” y ha mostrado su satisfacción “porque este acuerdo, que antes no había conseguido ningún gobierno, asegura el futuro de la Albufera”.
Para Ribó, “estamos ante un momento en el que se consolidan unas condiciones cada vez mejores para la Albufera”. El alcalde, quien ha anunciado que telefoneará a lo largo del día a la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, para agradecerle su predisposición al acuerdo, ha subrayado que “un gobierno progresista es un gobierno que trabaja por el medio ambiente y estos temas nos los trabajamos seriamente”.
Por su parte, el vicealcalde y concejal de Devesa-Albufera, Sergi Campillo, ha remarcado que “es fundamental tener esa dotación invernal para asegurar la calidad ambiental del sistema” y lo ha valorado como “un paso histórico y un antes y un después”. El vicealcalde ha destacado que el plan de cuenca se encuentra en fase de borrador y debe seguir su tramitación parlamentaria hasta ser aprobado por el Consejo de Ministros pero “obviamente, hemos tenido conversaciones al más alto nivel para asegurar que esto va adelante y ya, por lo tanto, podemos estar satisfechos del acuerdo al que hemos llegado después de tantos años de negociaciones, muchas veces de manera discretas, y donde todas las partes hemos llegado a una entente”. El concejal ha subrayado que “ha tenido que llegar un gobierno progresista para solventar este tema y quiero ponerlo de manifiesto. Y quiero reconocer el papel de este gobierno central para querer solventar un problema histórico para los valencianos y las valencianas”.
Por último, la consellera Mireia Mollà ha destacado “lo que representa la Albufera para el conjunto de valencianos y valencianas, y también lo que representa para el conjunto de España y de Europa, el humedal, el agua dulce, más importante de Europa”. Por eso, la consellera reseña que “por fin, de manera histórica, se hace una reserva de caudal ecológico para la Albufera que no está supeditado ni condicionado a ningún otro extremo y que garantiza también, en las épocas críticas, esa agua que necesitamos. Para mí es un antes y un después porque en los diferentes planes se había hecho alguna consignación siempre supeditada a sobrantes y a modernizaciones y que, además, siempre era de manera casi voluntaria”. Por eso, ha concluido la consellera, “estamos tremendamente satisfechos. Sabéis que hemos conseguido una de las cosas que dijimos y es que las modernizaciones que se han hecho hasta ahora, esos ahorros de agua, esas consignaciones de agua, deben ir a la Albufera sí o sí”.
El plan de cuenca 2022-2027
La Confederación Hidrográfica del Júcar ha cerrado su plan hidrológico de cuenca 2022-2027 pendiente de su aprobación por parte del Consejo de Ministros. El plan prevé, por primera vez, una aportación hídrica extra para la Albufera que asegure el caudal ambiental de la laguna y la realización de la “perellonà”, la inundación invernal de la laguna.
La aportación hídrica suplementaria llega a los 60 hectómetros cúbicos, que se desglosan en 14’51 hectómetros procedentes del embalse de Tous y que son producto de la modernización de la Acequia Real del Júcar; 10 hectómetros cúbicos del sistema del Júcar, que entrarán por la parte sur del lago; 10 hectómetros más del sistema del Túria, que ingresarán por la parte norte; y otros 26 que son fruto de las modernizaciones de infraestructuras previstas en diferentes sectores.
El lago de la Albufera sufre una insuficiencia hídrica que se ha agravado desde los años 80. El Ayuntamiento había solicitado en reiteradas ocasiones aportaciones hídricas suplementarias para garantizar el caudal hidrológico del lago y su inundación invernal, la conocida como “perellonà”. Las nuevas aportaciones de agua son fruto de las negociaciones que el Ayuntamiento de València, la Generalitat y el gobierno central, a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar, mantienen desde 2016, en el marco de los contactos para la redacción del plan de cuenca, con el fin de garantizar la supervivencia hídrica de la laguna.