València sigue impulsando un modelo de ciudad verde. De hecho, en la actualidad, València cuenta con 594 hectáreas de zonas verdes netamente urbanas con 14 parques y 289 jardines de barrios. Además, tal y como ha destacado el alcalde Joan Ribó, “el 70% de los valencianos y valencianas tienen una zona verde a menos de cinco minutos de su casa”. Un modelo de ciudad que seguirá desarrollándose en los próximos años con el objetivo de “crear un sistema interconectado de parques y espacios verdes, pues la renaturalización y las zonas verdes son fundamentales como espacios saludables que hacen la ciudad más amable”, ha recalcado el alcalde.
Así, en la capital de Turia ya se han llevado a cabo proyectos de gran envergadura, como el Parque Central, que conectará – cuando finalicen las obras de soterramiento – con un gran corredor verde que unirá los barrios del sur de la ciudad; la peatonalización y renaturalización de la plaza de la Reina; o la mejora del parque de Benicalap.
No obstante, València cuenta con otras actuaciones que supondrán nuevos pulmones verdes para la ciudad. Este es el caso del corredor verde al Saler; la transición huerta-ciudad en Campanar o Benimaclet; o el futuro parque de Desembocadura para el que ya se han presentado 17 propuestas, y que creará una fachada marítima más verde y azul.
De esta manera, el parque de Desembocadura de València alcanzará una superficie de 25,3 hectáreas desde el puente de L’Assut de l’Or hasta Natzaret. Y es que este gran proyecto de la ciudad engloba cuatro áreas en una única actuación, dando solución al tramo final del Jardín del Turia y conectando con los sectores urbanísticos de França, Ciutat de les Arts i les Ciències, Moreres-II, Cocoters y Grau.
Con la culminación de este proyecto “repararemos, en parte, una deuda histórica con los barrios de Natzaret y La Punta que se vieron afectados por la ampliación del Puerto”, ha señalado Ribó.
Por otra parte, otro de los proyectos que decantaron la balanza para que València consiguiera la Capitalidad Verde Europea ha sido la renaturalización del nuevo cauce del río Turia. En este sentido, cabe destacar que la Confederación Hidrográfica del Júcar ha iniciado los estudios para establecer un cauce interior y un caudal ecológico en el nuevo río Turia que conectará con el mar.
Como explicaba, en su día, el vicealcalde Sergi Campillo, “hay que recuperar el carácter fluvial de nuestra ciudad. Por eso, el objetivo es crear un nuevo ecosistema de río en esa nueva parte del cauce del río Turia y recuperar, después de 50 años, la conexión del río con el mar que se había perdido por el desvío y la construcción del plan sur”.
Finalmente, el alcalde ha señalado otras iniciativas que se están llevando a cabo en la ciudad en materia de transición ecológica, como la rehabilitación de viviendas “con criterios de ahorro energético, especialmente en los entornos más vulnerables y con peor calidad edificatoria”; o la creación de “la mayor planta de generación solar urbana de España en el cementerio municipal”.