València quiere ser referente mundial en tecnología. La ciudad ha presentado su candidatura para convertirse en la sede del Web Summit a partir de 2019. El Web Summit es uno de los eventos tecnológicos más importantes de todo el planeta y concentra no sólo avances e innovaciones con un objetivo económico, sino que parte desde la sostenibilidad y desde un "componente social".
El evento nació en la capital de Irlanda, Dublín, hace diez años, y la ciudad que lo acogerá hasta 2019 será Lisboa (Portugal). Es a partir de ahí cuando Valencia quiere ser la sede del Web Summit, y por ello ha presentado su candidatura, según anunciaron ayer el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, y el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
Una de las consecuencias inherentes de resultar la ganadora, es sin duda que la ciudad se convertiría en un centro neurálgico de la tecnología. El primer edil de València dijo que este "no es un evento cualquiera" y que su celebración en la capital del Túria lo convertiría en un "referente tecnológico en el mundo". Según el alcalde, las últimas ediciones del Web Summit congregaron a cerca de 70.000 participantes, por lo que quiso subrayar el impacto económico que implica.
Puig cree que solo con la postulación, València ya ha hecho parte del camino para ser un espacio de referencia. Además, el president valenciano apuntó que la ciudad cuenta con un "buen posicionamiento" en materia tecnológica, así como en otras características como el sistema universitario, sus infraestructuras, o su potencia turística, además de buenas capacidades tecnológicas, como es el caso de su extensa red de fibra óptica.
Con la candidatura, València se plantea albergar la Web Summit durante cinco años seguros y otros cinco años más con carácter prorrogable. Conllevaría una inversión por el cánon de unos 5 millones de euros, que asumirían fifty-fifty el Ayuntamiento y la Generalitat Valenciana. Asimismo, Ribó añadió que también la Asociación Valenciana de Empresarios se ha comprometido a dar respaldo económico al evento si se celebra en la ciudad y que incluso el Gobierno español podría declararlo de "interés general".