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El concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, se reunía con la jefa provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pilar Fúnez, para abordar las medidas de pacificación urbana que se están impulsando desde el Ayuntamiento de Valencia, y que, además de haber calmado el tráfico en puntos clave de la ciudad, también están ayudando a reducir la siniestralidad. Sin embargo, en esta reunión, Grezzi ha aprovechado para adelantar algunos puntos que contendrá el borrador de la nueva ordenanza municipal de movilidad.
Sin duda, uno de los aspectos más destacados ha sido el anuncio de que se establecerá un límite de velocidad de 30 km/h en aquellas calles de la ciudad que solo cuenten con un carril y que, además, sean de un único sentido. Una medida muy demandada en el proceso participativo preliminar, que se creó para elaborar la nueva ordenanza, y que ya funciona en otras ciudades del Estado.
Limitar la velocidad a 30km/h no es nada nuevo para Valencia, ya que no solo se ha establecido esta medida en la calle la Paz, sino que fue una de las pautas a seguir para conseguir la pacificación de Ciutat Vella o del barrio de Campanar. Sin embargo, cuando se apruebe la nueva ordenanza, esta limitación se extenderá a todas las calles de la ciudad que cumplan con estos dos requisitos.
En este sentido, Grezzi ha destacado que “reducir la velocidad en el ámbito urbano es un compromiso mutuo de la Concejalía y la Jefatura Provincial de Tráfico para reducir la siniestralidad y mejorar la movilidad universal, la accesibilidad y la seguridad en nuestras calles, que deben ser, en prácticamente todos los casos, espacios de convivencia”.
Así, y con el objetivo de que se cumplan estas medidas que se irán incorporando poco a poco en la ciudad, desde la DGT se ha instado al Consistorio a intensificar los controles de velocidad, así como que se intensifique la persecución de las infracciones para conseguir una ciudad mucho más pacífica, en cuanto al tráfico rodado.