Es la cuarta vez que lo consigue: el València Basket es, de nuevo, campeón europeo. Además con un rival conocido, el equipo alemán Alba Berlin, contra el que ya ganó su segunda Eurocup en 2010. Aún con esto, hay un factor que hace esta victoria más especial: es la cuarta, pero la primera que consigue en casa, en La Fonteta, frente a su afición.
A un minuto de que finalizara el partido los valencianos aventajaban a los berlineses 21 puntos: 89 a 61 señalaba el marcador. Sin embargo, aunque el València Bàsket dominó el juego durante los tres últimos cuartos, en el primero se respiraba preocupación.
Pocos minutos tras el inicio, el Alba Berlin había conseguido 11 puntos frente a los cero del València Basket. Sin embargo, unos cambios rápidos -entraron Dubljevic y Matt Thomas- permitieron acabar el cuarto 17-18. Tras un triple de los valencianos y un simple de los el marcador se igualó para no volver a estarlo. El 20-20 se convirtió en 30-20 y 40-20. Ese fue el máximo, 20 puntos de ventaja sobre el rival, que llevaba un buen rato sin acertar ningún balón.
Quizás esa ventaja relajara al equipo valenciano, que permitió a los berlineses recortar hasta situarse el marcador en 46-33. Sin embargo, tras la vuelta del descanso y finalizar el tercer cuarto, un 63-44 hacía saborear la victoria de muchos de los aficionados presentes.
El València Basket, entonces llamado Pamesa, consiguió su primera victoria europea en 2003 frente al equipo esloveno Novo Mesto. Siete años después consiguió su segunda victoria frente al ahora también vencido, Alba Berlín. Hace sólo 4 años, en 2014, el equipo consiguió su tercera copa contra el equipo ruso UNICS Kazán y ahora, en casa, consiguen la cuarta.
A un 1,8 segundos de que finalizara el partido un pitido lo interrumpe, hay que hacer un saque. Parece que todo el mundo celebra ya la victoria por todo lo alto, pero al dejar seguir el cronómetro y llegar a cero, el estadio enteró se alzó y gritó para celebrarlo. Al coro de "campeones", los jugadores -y Pam, el masclet mascota del equipo- se abrazaban y saltaban frente a su afición.