El comité de empresa del Departamento de Salud de la Ribera se ha concentrado este jueves contra "los incumplimientos" de la Conselleria de Sanidad tres años después de la reversión y han advertido de que seguirán trabajando con "determinación, serenidad, y responsabilidad" hasta conseguir "la integración real sin nuevos experimentos". ¡Basta ya!, exigen.
Al respecto, en un comunicado, señalan que "la conselleria da la impresión de que quiere que fracase el proceso de integración del personal laboral" y por eso "bloquea cualquier posibilidad de acuerdo, sus propuestas recortan derechos existentes y son inaceptables, nos proponen nuevamente ser empleados de segunda".
En ese sentido, lamentan que todos asumieron el cambio "con profesionalidad y con la responsabilidad" porque "todos sabíamos que no iba a ser fácil". Sin embargo, tres años después "no se han cumplido las promesas que nos hicieron" y siguen protestando porque "la Conselleria no tiene ninguna voluntad negociadora y porque tenemos una dirección y una cadena de mando salpicada de prejuicios consciente o inconscientemente".
Así, lamentan que tras 28 meses negociando el convenio se han registrado 11 reuniones y que la conselleria "ha vuelto a la mesa de negociación, obligada por la inspección de trabajo". Además, afirman que no quieren que mejorar las condiciones laborales, ni han hecho caso a la recomendación del Síndic de Greuges, que recomendó a la Sanidad que llegara a un acuerdo para complementar al 100% el salario en caso de baja laboral por covid al personal laboral. "Ni eso han querido, es indigno de una Conselleria llamada de Sanidad Universal i Salud Publica", reprochan.
Así, señalan que tras tres años las condiciones del personal laboral siguen "igual de lejos o más incluso" del resto del personal de la conselleria de Sanidad.
AGRAVIOS COMPARATIVOS
Así, a los "incumplimientos" del convenio en materia de promoción y traslados internos, jubilación parcial, aplicación del plan de igualdad, o los incrementos de jornada, se une "los agravios" derivados de la falta de voluntad negociadora de la Conselleria, como el complemento del 100% del salario en caso de baja, los diferentes criterios de evaluación de la carrera profesional, las medidas de conciliación, la compensación de noches o las jornadas de trabajo, vetados en el acceso a los planes para reducir la demora asistencial.Del mismo modo, lamentan tener que "sufrir" a una dirección que "no termina de cogerle el pulso al departamento, situación que también sufren nuestros compañeros estatutarios, cambiando constantemente planillas y jornadas, realizando modificaciones sustanciales de trabajo, cuestionando nuestros derechos, y sin empatía alguna". "Todo esto ha hecho saltar por los aires la paz social".