Más y más toallitas: "Quedan unas 2.000 toneladas por extraer"

[:es][:ca][:]

Guardar

"Es un atasco, producido principalmente por toallitas higiénicas, que ha afectado a 3,5 Km de colector. Ahora mismo tenemos limpio 1'6 Km y estamos con los 100 metros más difíciles de todo el recorrido". Así ha resumido el problema Jesús Cenicero Rozalén, ingeniero de saneamiento del servicio del Ciclo Integral del Agua del Ayuntamiento de València. Esperan sacar, todavía, 2.000 toneladas más de toallitas.

Un túnel negro, no demasiado grande, se mete bajo tierra justo detrás del Oceanogràfic. Una pequeña excavadora, cada ciertos minutos, sale del interior cargada de una masa negra, una mezcla de toallitas y restos fecales. Hay que entrar con mono, botas, mascarilla, casco e incluso una alarma de gases. "En verano es habitual que tengamos que salir por problemas de gases", ha explicado uno de los operarios.

Dentro de un mes el equipo que se dedica a la limpieza del Colector Norte, que da servicio a un 60% de la ciudad, considera que estará en "condiciones razonables". Este último tramo de entre 100 y 150 metros es el más difícil porque no es posible acceder directamente al mismos. "Es un tramo de transición sin acceso para la extracción de las toallitas. Estamos en una zona en que pasamos de una sección visitable a otra no visitable, llena hasta arriba en la que no se puede entrar, por lo que hay que realizar los trabajos desde fuera. No hay posibilidad de inspección y trabajamos un poco a ciegas", ha explicado el ingeniero.

Cenicero ha señalado que, según lo que él conoce, el caso del atasco de toallitas de València es el más grave en europa "y puede que en el mundo". Ha recordado que, hasta ahora, se han retirado 5.000 toneladas y quedan todavía otras 2.000. Un dato que compara con el caso de Londres, que también fue noticia, con un atasco de 100 metros y 130 toneladas.

El técnico ha explicado que parte del problema es la propia construcción del colector, que es un diseño de hace 50 años. Según ha detallado, las "toallitas son materiales muy pesados" que el agua, en condiciones normales, "no arrastra". Los colectores de valencia, que son duales -recogen aguas fecales y de lluvia-, propician que las lluvias torrenciales habituales en la región, arrastra estos residuos y los acumula en "el punto final". "Pero las toallitas presentan problemas en toda la magnitud del sistema, aunque el peor sitio es este. En otros es más fácil combatirlo", ha añadido.

Con la finalización de este tramo Cenincero explica que, aunque aún será preocupante, la "situación de emergencia" se habrá acabado. La situación que se encontraron exponía el tramo final del antiguo cauce del Turia, al final de la Ciutat de les Arts, de un vertido de aguas fecales sin tratar a causa del tapón de las toallitas.

Para el ingeniero las acciones individuales están claras: "El mensaje es la responsabilidad de todos de utilizar bien los elementos que disponemos. El retrete no es un contenedor. Todo lo que se echa en el baño debe ser biológicamente degradable".

Galería completa

[related:galleries:1:{orientation:vertical}]
Destacados