A partir del 20 de marzo, la plaza del Ayuntamiento de València comenzará su proceso de peatonalización permanente, mediante una actuación blanda a base de pilones, báculos y jardineras de distintos tamaños. Una actuación blanda que se mantendrá hasta que se resuelva el proyecto ganador del concurso de ideas, que está pendiente de iniciarse. Sin embargo, esta actuación de peatonalización blanda sí que traerá otros cambios sustanciales para el aspecto de la plaza.
Tal y como ha informado la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, el nuevo suelo de la plaza del Ayuntamiento adquirirá un color rojizo, que unificará el espacio ganado. Además, será más poroso y, por tanto, más seguro para el peatón. La instalación de este nuevo pavimento está prevista para el mes de junio.
Asimismo, Gómez ha anunciado la elaboración de un manual de peatonalizaciones blandas, con el objetivo de unificar los criterios, tanto en el asfaltado como en el mobiliario urbano, para futuros proyectos de peatonalización de espacios.
Cuando comience la actuación blanda de la plaza del Ayuntamiento – después de Fallas – se procederá, además, a la eliminación de semáforos, mobiliario y dársenas prescindibles, así como a la instalación de la señalización adecuada que delimite la diferencia de uso entre los viandantes y la zona destinada al tráfico rodado.
Esta primera fase de cierre permanente y continuado de la plaza, que se culminará con un proyecto de remodelación definitiva, permitirá recuperar alrededor de 12.000 metros cuadrados de espacio público para la ciudadanía. Sin duda, la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento es un paso muy importante que muestra el objetivo final del Gobierno del Rialto: el cierre al tráfico rodado del centro de la ciudad, creando un amplio espacio peatonal que unirá la plaza de la Reina, el entorno de la Lonja y el Ayuntamiento.