Un recién nacido ha sido auxiliado por dos agentes de la Policía Local de València en una vivienda de Montolivet. El suceso, que tuvo lugar la noche del pasado martes día 10, se solventó gracias a una patrulla de la Comisaría de Proximidad de Ruzafa. El cuerpo se presentó en el lugar de forma inmediata tras haber recibido una alerta urgente porque un bebé lactante de 11 días se había atragantado con su propio vómito y no respiraba”, al que finalmente le lograron salvar la vida.
Tal como ha informado la Policía Local, al llegar al domicilio los agentes encontraron a la madre de la criatura con el bebé en brazos y en estado de conmoción por la situación: el lactante no respiraba y presentaba síntomas evidentes de falta de oxígeno, como el color azulado en la piel.
Los agentes, en coordinación telefónica con el Centro de Información y Coordinación de Urgencias, CICU, de la Generalitat, pusieron al bebé boca abajo sobre el brazo para despejar las posibles obstrucciones en sus vías respiratorias, y estimularon los pies del bebé para provocar una reacción corporal que ayudara a las maniobras dirigidas.
Tras varios intentos, el lactante rompió a llorar y recuperó la respiración, y enseguida llegó asistencia médica del SAMU, que logró estabilizar al pequeño y solicitó la escolta de los agentes para llevarlo, de manera urgente, al Hospital Doctor Peset.