Ocho hombres han sido detenidos después de que varios agentes de la Policía Nacional desmantelaran dos puntos de venta de droga en el barrio valenciano de Torrefiel. Los arrestados, de entre 22 y 35 años, son de origen argelino y marroquí, y están acusados de ser autores de los delitos de tráfico de drogas, receptación y ocupación de bien inmueble. Estas personas, tal y como indica la Jefatura de la Policía Nacional, al parecer suministraban sustancia estupefaciente a cambio de objetos sustraídos desde un inmueble que ocupaban ilegalmente.
Las investigaciones se iniciaron hace cuatro meses, tras tener conocimiento de que en una vivienda de Torrefiel, ocupada ilegalmente por varias personas, podría estar suministrándose sustancias estupefacientes.
Los agentes comprobaron que efectivamente el inmueble se utilizaría para la venta de diversas drogas; como hachís, metanfetaminas y algunos fármacos, y que en muchas ocasiones sus ocupantes intercambiaban la droga por objetos procedentes de delitos contra el patrimonio. Asimismo, localizaron un segundo domicilio, donde residía en principal investigado.
Finalmente, el pasado viernes se desarrolló una operación policial en la que se registraron ambas viviendas y que ha culminado con la detención de ocho hombres como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas, receptación y ocupación de bien inmueble. También se han intervenido 156 pastillas de MDMA, 152 gramos de hachís, 10 gramos de marihuana, 2 gramos de karkubi y 527 pastillas de diferentes fármacos, como lyrica, diazepam, clorazepam y vomiteb, además de tres básculas de precisión, un arma simulada, un útil empleado en la fractura de cristales y 250 euros.
Los investigadores también han intervenido numerosos objetos que podrían tener un origen ilícito, como teléfonos móviles, ordenadores, patinetes eléctricos, bicicletas, herramientas, material deportivo y electrónico, entre otros, así como diversa documentación a nombre de terceras personas. Se continúan las investigaciones a fin de determinar la procedencia de dichos efectos y, en su caso, poder devolvérselos a sus legítimos propietarios.
Tras efectuar los registros, los agentes contactaron con el propietario de la vivienda ocupada, haciéndole entrega de la misma y protegiendo el entorno hasta la colocación de una puerta anti ocupación.
Los detenidos, todos con numerosos antecedentes policiales y en situación irregular en España, han pasado a disposición judicial.