Desde el inicio de la crisis sanitaria provocada por la Covid-19 se ha constatado un aumento de la violencia de género. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a escala mundial, antes de la pandemia, una de cada tres mujeres sufría violencia física o sexual, en su mayoría, por parte de su pareja.
Desde la llegada del coronavirus los nuevos datos indican que en muchos países se han incrementado las llamadas a las líneas de atención de casos de violencia en el hogar, sobretodo, debido a la época del confinamiento donde muchas mujeres tuvieron que convivir con sus maltratadores.
Un ejemplo de ello se puede constatar en la Comunitat Valenciana. El teléfono de atención a las víctimas de violencia de género que ofrece la Generalitat, el 900 580 888, recibió en 2020, año de la pandemia, más de 62.000 llamadas, lo que supone 10.000 más que en 2019. De todas ellas, solo un 11% fueron realizadas por parte del entorno de las víctimas, frente al 89% que son realizadas por las propias víctimas o por personas profesionales.
Este teléfono atiende a las víctimas y también a cualquier persona que quiera informarse o denunciar alguna situación de violencia contra la mujer, como el caso de violencia de género, agresión o abuso sexual, acoso sexual, matrimonio forzoso, mutilación genital femenina, esterilización forzosa y aborto coercitivo, ciberacoso o la trata y/o explotación sexual.
“Hora de Parlar”
La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, presentaba ayer la campaña 'Hora de Parlar', puesta en marcha por su departamento con motivo de la celebración el 25 de noviembre del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, con la que se pretende implicar a la sociedad en la denuncia de casos o sospecha de situaciones de violencia de género.
Esta campaña, en la que se le da la vuelta al dicho 'ver, oír y callar' que se cambia por 'ver, oír y hablar', pretende "interpelar a toda la ciudadanía y al entorno de las víctimas, y que nos da la herramienta de los Centres Dona como el recurso que tenemos a nuestro alcance", afirma Oltra.
El principal objetivo es que los Centres Dona 24h "sean conocidos por cualquier persona, que igual que sabe que tiene que acudir al centro de salud cuando tiene un resfriado o dónde está su colegio de referencia, cuando hay una sospecha o una situación de violencia de género sepa dónde acudir, cual es el teléfono y cuáles son los Centres Dona a su disposición", tal y como reconoce la vicepresidenta.
Para conseguirlo es necesario "incentivar y dar a conocer los magníficos servicios que se prestan en la Red de Centres Dona", tal y como se hace con esta campaña, ya que "queremos que las víctimas, el vecindario, el entorno afectivo, familiar, las amistades, cualquiera que piense que tiene una víctima cerca y no sabe que hacer conozca los servicios de protección de las víctimas y que tenga claro dónde y cómo tienen que acudir. Que sepan que la Administración está a su servicio", incidía la titular de Igualdad.
Se cuadruplica la inversión
Ante este escenario, el Botànic ha trabajado desde 2015 para tratar de establecer políticas que terminen con esta lacra social. Concretamente, ese mismo año se invertían un total de 7,6 millones de euros para combatir esta lacra, cifra que se ha multiplicado por cuatro en este tiempo, llegando a los 28,3 millones de euros que el presupuesto autonómico destinará el próximo 2022.
Una cifra a la que hay que sumar los 11,3 millones de euros que el Ejecutivo valenciano ha previsto para que la Conselleria de Justicia actúe en favor de aquellas mujeres que sufren esta lacra social. Una apuesta por parte del Botànic por proteger a las víctimas del delito y, sobre todo, las de violencia de género.