La Comunitat Valenciana está viviendo la segunda ola de calor del verano. Una ola de calor extremo que ha hecho que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) haya activado la alerta naranja y amarilla en algunos puntos del territorio valenciano. Y es que se prevé que las temperaturas alcancen los 40 grados en algunos municipios del interior sur de la provincia de Valencia. Ante estos episodios de calor, autoridades sanitarias han recomendado a la ciudadanía seguir una serie de consejos para prevenir los efectos de las altas temperaturas. Estos son:
• Mantenga fresca su vivienda: Es esencial mantener la temperatura de su hogar por debajo de los 32ºC durante el día y por debajo de los 24ºC durante la noche, especialmente en hogares donde residen personas mayores de 60 años, niños o enfermos crónicos.
• Manténgase fresco e hidratado: Beba abundantes líquidos, al menos un litro y medio, incluso si no siente sed, a menos que su médico le haya restringido la ingesta de líquidos. Evite bebidas con alcohol, cafeína y azúcar. Consuma comidas ligeras y más frecuentes.
• Evite la exposición al calor: No salga al exterior durante las horas más calurosas del día. Si necesita salir, permanezca en zonas sombreadas y use ropa ligera, sombrero, gafas de sol y protector solar.
• Sitúese en la parte más fresca de la vivienda, especialmente durante la noche. Si no puede mantener fresca su vivienda, pase 2 o 3 horas diarias en un lugar fresco y acondicionado. No realice esfuerzos físicos importantes. Si practica deportes, hágalo en las primeras horas de la mañana y rehidrate bien después. Refrésquese cada vez que lo necesite, con baños o duchas frías. Si no es posible, utilice baños fríos de pies, toallas frescas o envases refrigerados.
• Mantenga los medicamentos en un lugar fresco para garantizar su eficacia.
Y es, precisamente, en los meses de verano cuando se debe prestar una especial atención a las personas vulnerables, es decir, bebés, niños, enfermos crónicos o encamadas y mayores de 65 años. La Comunitat Valenciana es una de las comunidades autónomas más envejecidas de España, junto con la Comunidad de Madrid, con una proporción de 132 personas mayores de 64 años por cada 100 menores de 16 años, lo que representa un índice de envejecimiento del 132,63%, según datos del INE.
Con la llegada del verano, los efectos del calor, la soledad y la falta de interacción con el entorno cercano representan riesgos significativos para la salud de más de un millón de personas mayores en la Comunitat Valenciana. De hecho, de acuerdo con un estudio reciente del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), el 11,4% de la población española mayor de 65 años afirma sentirse más triste.
Ante este escenario, expertos en el cuidado y la asistencia domiciliaria, como Cuideo, recuerdan a los familiares de la importancia de establecer una rutina de llamadas, pero también de visitas para disminuir la soledad no deseada en las personas mayores. “Las interacciones sociales de calidad son fundamentales para la salud física y mental y el bienestar de las personas. Sin embargo, la soledad prolongada en los mayores tiene efectos negativos significativos, como la afectación de su autoestima y estado de ánimo, y la disminución de su interés por interactuar y relacionarse. Además, el aislamiento social incrementa el riesgo de distimia, ansiedad y enfermedades neurodegenerativas como la demencia senil, el Alzheimer y el Parkinson”, señalan desde Cuideo.
El 20, 08 % de la población de la Comunitat Valenciana es mayor de 65 años
Según datos del INE, la población mayor de 65 años supone el 20,08% del total de los habitantes de la Comunitat Valenciana y hay más de 230.000 personas mayores de 65 años que viven solas. Es por este motivo por el que desde las administraciones públicas se está poniendo especial atención en este colectivo. De hecho, la Generalitat Valenciana ha convocado subvenciones de hasta 750.000 euros para programas de envejecimiento activo y lucha contra la soledad no deseada, que serán financiados a través de la Vicepresidencia y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda.
Pero, además, en estos meses de verano, la atención a las personas mayores se vuelve todavía más imprescindible. Y es que como señala la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), “a partir de los 65 años, aumenta el riesgo de sufrir un golpe de calor”. Por eso, es fundamental advertir las señales de alarma: dolor de cabeza, piel seca, sudoración excesiva, respiración agitada, pulso excesivo, hiperventilación, sensación de debilidad, calambres y fiebre.
Como explica Teresa Ruiz, responsable de SAD de Cuideo, “los cuidadores que se desplazan hasta los domicilios de los usuarios no solo se adaptan a las necesidades del mayor, con un servicio personalizado, sino que están formados para prevenir aquellas situaciones que puedan poner en riesgo al usuario relacionado con las altas temperaturas. Así, ponemos especial atención en que se mantengan hidratados y en el tipo de dieta – que sea ligera – pero también en la ventilación del hogar o la ropa”.
Como añade el CEO de Cuideo, Adrià Buzón, “durante el verano, especialmente cuando el resto de familiares está de vacaciones, los cuidadores juegan un importante papel de compañía. Además, se trata de un colectivo muy vulnerable al que le afecta mucho el calor y los cuidadores se encargan de minimizar el impacto: se adaptan los horarios para que no salgan a la calle en las horas peligrosas de sol, supervisan su correcta hidratación e incentivan el consumo de agua”.
Para proteger a los mayores durante el verano, los expertos de Cuideo recomiendan incrementar el consumo de platos fríos como gazpachos, sopas frías o ensaladas; mantener la vivienda fresca y ventilada, especialmente entre las 11:00 h y las 17:00 h, horas de mayor calor y exposición solar; vestir con ropa ligera, fresca y de colores claros; realizar baños de esponja o duchas frecuentes para bajar la temperatura corporal; y evitar salir durante las horas de mayor calor.
Dentro de los servicios que ofrece Cuideo, la compañía acaba de incorporar Cuideo Go, orientado a una fase de predependencia. Cuideo Go se dirige, especialmente a aquellas personas que normalmente viven solas y se valen por sí mismas, pero que comienzan a necesitar cierta asistencia en áreas específicas. Con Cuideo Go, un asesor de Salud y Bienestar de Cuideo acudirá al domicilio una vez por semana para comprobar el estado del usuario y del domicilio.