La Generalitat se ha marcado como objetivo transformar la atención en cuanto a salud mental se refiere para revertir los indicadores que indican una necesidad urgente de intervención. Y es que el territorio valenciano se enfrenta la mayor prevalencia de trastornos mentales registrada en el conjunto del Estado, con un 25,1% de la población afectada, en comparación con el 15,0% estatal. Una situación que se extiende a la ideación suicida, al consumo de sustancias y al uso compulsivo de internet, especialmente entre los jóvenes.
Los números revelan más realidades preocupantes: el 42,3% de las valencianas y el 39,7% de los valencianos mayores de 14 años corren el riesgo de experimentar problemas de salud mental. Los niños y niñas no están exentos, con un 10,7% de menores de 15 años en riesgo. Además, la Comunitat Valenciana tiene la segunda mayor tasa de casos atendidos en Atención Primaria por ideación suicida o intentos autolíticos. El consumo de alcohol y cannabis es el más alto en el país, y el segundo en tabaco, en la población de 15 a 64 años.
La preocupación se agrava al examinar los recursos disponibles, siendo una de las tres regiones con la peor dotación de recursos asistenciales y la tercera peor en formación de especialistas por habitantes. El informe, presentado por la Generalitat como base de actuación del Plan Valenciano de Salud Mental y Adicciones 2024-2027, también señala la utilización generalizada de programas preventivos sin eficacia previa contrastada. La falta de equidad territorial y las desigualdades interdepartamentales en los recursos también se hacen evidentes.
Frente a este panorama, el Plan Valenciano de Salud Mental y Adicciones 2024-2027 se presenta como una solución que busca actuar con urgencia. Con un objetivo general de mejorar la salud mental en la población, el plan se apoya en nueve principios rectores, que incluyen la equidad territorial, la evidencia científica, y la priorización de la promoción y prevención. Un total de 80 acciones concretas que van desde la promoción de la salud mental positiva hasta la cooperación internacional.
80 acciones transformadoras
En la línea estratégica de promoción de la salud mental positiva, se destaca la inclusión de la detección de la depresión en la Cartilla de Salud Infantil y la creación de Unidades de Detección Precoz en el medio escolar. Estas acciones buscan intervenir y proporcionar el apoyo necesario desde una edad temprana.
El plan también aborda la equidad en la distribución de recursos, la atención a la infancia y adolescencia y la atención al Trastorno Mental Grave. La creación de hospitales de día, unidades especializadas y la implementación de protocolos específicos son pasos clave hacia una atención más especializada y accesible.
Asimismo, la formación sanitaria especializada, la investigación y la docencia son esenciales para desarrollar un cuerpo profesional competente. El plan propone, además, un aumento significativo en el número de plazas acreditadas para especialidades clave, así como programas de formación continuada para diversos profesionales, entre otras acciones clave.
Respaldo histórico a la transformación
La implementación de este ambicioso plan no carece de recursos. La Generalitat destinara 283,8 millones adicionales para ejecutar el Plan Valenciano de Salud Mental y Adicciones 2024-2027, alcanzando un presupuesto total de 724 millones de euros durante la legislatura, el mayor hasta la fecha. Este compromiso financiero refleja la gravedad de la situación y la determinación de abordarla de frente.
El informe y el Plan Valenciano de Salud Mental y Adicciones delinean un camino claro hacia la recuperación. Abordar la crisis de salud mental en la Comunitat Valenciana no solo requiere recursos financieros significativos, sino también un enfoque integral que incluya prevención, atención especializada y apoyo continuo. El éxito de este plan dependerá de su implementación efectiva y del compromiso continuo de todos los actores involucrados en la atención a la salud mental en la región.