La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha afirmado que nuestra sociedad "tiene derecho a que no haya violencia machista, a no ser una sociedad en la que todavía perduren las desigualdades entre las mujeres y los hombres, cuya expresión más grotesca es la violencia machista y el asesinato".
Oltra ha realzado estas declaraciones tras los tres minutos de silencio guardados a las puertas del Palau de la Generalitat para mostrar la repulsa de la sociedad valenciana por el asesinato, el pasado 26 de octubre en Torrevieja, de Maija, de 68 años, cuya muerte se confirmó ayer como un nuevo caso de violencia machista. La concentración silenciosa ha estado encabezada por el president de la Generalitat, Ximo Puig.
"Hoy estamos aquí por Maija, que en su vida ya había sufrido la violencia machista de su pareja anterior, al que ya había denunciado por agresiones machistas -ha explicado la vicepresidenta -. Ella pensaba que había rehecho su vida y que, por fin, era una mujer libre, querida. Pero su nueva pareja la asesinó".
Oltra ha señalado que la historia de Maija es "la de muchas mujeres, es una historia que nos tiene que avergonzar, con la que tenemos que acabar" como sociedad. "Porque Maia tenía derecho a la libertad y al respeto; a poder ser feliz, a compartir el amor, los afectos, a ver cómo seguían creciendo sus hijos y sus nietos; tenía derecho a la cotidianidad, a las pequeñas cosas que nos hacen sufrir y disfrutar, a lo que en definitiva significa la vida".
La vicepresidenta ha agradecido, una vez más a las instituciones presentes en esta concentración, agentes económicos y sociales, formaciones políticas democráticas que integran el Pacto Valenciano contra la Violencia Machista, entidades, asociaciones feministas, empleados y empleadas públicas y "a la buena gente de la sociedad valenciana, que dice una vez más que estamos enfrente de la barbarie machista y unidas y unidas con la víctima y las personas que la querían".