De las 183 medidas que contiene la Estrategia Valenciana contra las Violencias Sexuales 2021-2025, 113 se encuentran ya ejecutadas o en ejecución (62%), 29 en proceso (16%) y 41 no desarrolladas (22%). Estas son las conclusiones de las cuales ha informado hoy Aitana Mas, vicepresidenta de la Generalitat y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas al Pleno del Consell.
Una estrategia que nacía hace dos años con el objetivo de dotar al Botànic de un instrumento trasversal que permita erradicar este tipo de agresiones, atender a las mujeres supervivientes y establecer mecanismos de prevención.
En este sentido, el texto plantea medidas en diversos ámbitos: educativo, cultural, laboral, sanitario y de la salud, servicios sociales, digital, social y de la comunicación, espacio público y del entorno afectivo y familiar.
Según la última macro-encuesta de violencia contra la mujer, realizada en 2019 por la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género, el 60,5% de las mujeres de entre 16 y 24 años dicen haber sufrido algún tipo de agresión sexual o que el 81,2% de las violaciones se producen por hombres que la víctima conoce.
Estrategia Valenciana contra las Violencias Sexuales
La Estrategia Valenciana contra las Violencias Sexuales 2021-2025 cuenta con tres ejes que se estructuran en 10 ámbitos, 53 objetivos y 183 medidas con las que se pretende desarrollar actuaciones, crear sinergias, unir esfuerzos, coordinar y reforzar estructuras para el abordaje de las violencias sexuales mediante la información, la sensibilización y la prevención.
Entre las medidas educativas ya desarrolladas o en marcha destacan, entre otras, la introducción de la educación afectivo-sexual obligatoria en educación primaria y secundaria; la formación del profesorado para realizar la actualización curricular de cada materia reconociendo el protagonismo cultural e histórico de las mujeres, en el marco del programa ‘Coeducacentres’; y la elaboración y activación en el ámbito universitario de un protocolo a seguir antes situaciones donde se detecten violencias sexuales. Tanto la Universitat de València como la Universitat Jaume I ya lo han puesto en marcha.
Asimismo, ya se han establecido las cláusulas de responsabilidad social relacionadas con la promoción de la igualdad y prevención de las violencias sexuales entre los criterios de adjudicación y ejecución de los contratos de la Administración.
Otras de las medidas desarrolladas son: elaboración de un protocolo que aborda la prevención, detección e intervención en casos de violencias sexuales en centros residenciales de personas mayores; implantación de la Red de Centros Dona Rural para la detección de la violencia contra las mujeres en las zonas de interior de la Comunitat Valenciana (el nuevo Centro Dona Rural de Xàtiva se suma a los de los municipios de Yátova, Segorbe, Sant Mateu y Elda).
Dentro de las actuaciones ejecutadas, destaca también el programa de abordaje de la violencia sexual intrafamiliar con recursos específicos para atender a niños, niñas y adolescentes víctimas de abusos, siguiendo el modelo ‘Barnahus’, cuyo servicio piloto se está poniendo en marcha en Castelló de la Plana.
Asimismo, el programa ‘Alba’ para mujeres víctimas de explotación sexual, trata o prostituidas se está consolidando como un servicio de atención e itinerarios de acompañamiento y alternativa sociolaboral y residencial para estas mujeres.
La investigación, la formación y la detección son otros de los aspectos que se están trabajando porque resulta fundamental disponer de datos, instrumentos y también profesionales que estén capacitadas para identificar y detectar los signos de alarma.
La evaluación de las medidas contempladas en la Estrategia se ha realizado a partir de la información que aportan las partes intervinientes en relación con las actuaciones que les afectan.