La Comunitat Valenciana está experimentando un preocupante aumento de casos de COVID-19, alcanzando una incidencia de 221,4 casos por cada 100.000 habitantes. Esta cifra, según el último informe del Sistema de Vigilancia de Infecciones Respiratorias Agudas (Sivira), se asemeja a los niveles registrados en las primeras semanas de enero de este año, cuando la tasa de incidencia era de 226 casos por cada 100.000 habitantes.
El incremento de los casos de coronavirus en las últimas dos semanas ha sido notable. La incidencia, que se situaba en 95,5 casos por cada 100.000 habitantes a mitad de junio, subía a 206,3 casos por cada 100.000 habitantes hace siete días, y ahora se encuentra en 221,4. Esta tendencia al alza contrasta con la tasa registrada a finales de junio del año pasado, que era de apenas 37 casos. Además, es importante señalar que la realización de pruebas diagnósticas ha disminuido, lo que podría significar que la incidencia real sea aún mayor, ya que muchas personas optan por realizarse pruebas en casa y no informan a la Conselleria de Sanidad sobre sus resultados.
Una diferencia clave con respecto a la situación de enero, que obligó la implantación de la mascarilla obligatoria en los centros sanitarios, es la tasa de gripe común, que en ese momento era de 536,7 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que actualmente se sitúa en solo 5,3.
Tendencia a estabilizarse
A pesar del incremento en la incidencia de COVID-19, los datos recientes muestran una tendencia hacia la estabilización. Desde la dirección general de Salud Pública consideran que la curva se está conteniendo y han indicado que el aumento de casos no se ha traducido en un incremento significativo de ingresos hospitalarios por problemas respiratorios, por lo que la mayoría de los casos actuales parecen ser leves.
En la penúltima semana de junio, la tasa de ingresos hospitalarios fue de 4,1 personas por cada 100.000 habitantes, el dato más alto de 2024. Sin embargo, el último registro muestra un descenso a 2,6 ingresos por cada 100.000 habitantes. Aunque sigue siendo una cifra elevada en comparación con las tasas de hace tres semanas, cuando casi no se registraban casos graves, con una tasa de 0,6 pacientes.
Afectación por edades
Como en la época más dura de la pandemia, la gravedad de los casos sigue afectando mayoritariamente a las personas mayores. La edad media de los afectados graves es de 79 años, con una estancia media en la UCI de tres días, y un 3,6% de ellos termina falleciendo. Un tercio de los valencianos mayores de 80 años que ingresaron en el hospital con síntomas graves de COVID-19 lo hicieron por complicaciones derivadas del virus. Entre las personas de 65 a 79 años, este porcentaje es del 27%. Por otro lado, el virus apenas causa problemas destacables en personas menores de 45 años.
Prevención y responsabilidad individual
La Comunitat Valenciana se enfrenta a un nuevo aumento de casos de COVID-19 en pleno inicio del verano y del aumento de turistas y de la movilidad. Aunque la incidencia ha subido considerablemente, la estabilización reciente y la predominancia de casos leves ofrecen un panorama menos alarmante que en meses anteriores.
Las autoridades sanitarias continúan vigilando la evolución de la situación, subrayando la importancia de la prevención y la responsabilidad individual para mantener bajo control la propagación del virus.