La dificultad para acceder a una vivienda digna es una de las máximas preocupaciones en la actualidad para las personas jóvenes. El contexto socioeconómico actual ha provocado un aumento del precio de las hipotecas y de los alquileres que, sumado a la precariedad de muchos trabajos, hacen prácticamente imposible la emancipación de este sector de la población.
En este sentido, el president de la Generalitat Valenciana y candidato a la reelección por el PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha prometido que centrará sus esfuerzos en que los próximos cuatro años sean “la legislatura de la vivienda”.
Así, en caso de que continúe como president, ha prometido que llevarán a cabo un plan con varios ejes, que incluye la movilización de todos los suelos públicos disponibles, la construcción directa para alquiler social o la financiación de la promoción privada, en suelo público, para alquiler público.
En la misma línea, ha citado la adquisición de "todas las viviendas posibles" a través derechos de tanteo y retracto, compra directa o compra de emergencia, y ha puesto en valor las "más de mil viviendas adquiridas esta legislatura" o la rehabilitación de barrios humildes.
"El objetivo será atender la urgente necesidad de los jóvenes, intensificar la eficiencia energética e impactar sobre los precios de mercado", ha recalcado el candidato socialista, quien ha garantizado que lo harán "cooperando" con el sector privado y con los fondos europeos.
Autonomía energética y estado del bienestar
Junto a esta medida, el president incide en la energía como eje fundamental para lograr la autonomía energética, uno de los principales "reto" a alcanzar en 2030. Por ello, Puig se ha comprometido a alcanzar un pacto valenciano por la energía con agentes políticos, administraciones y actores privados.
Otra de las prioridades para el jefe del Consell es "actualizar, revigorizar y blindar el estado del bienestar". Por ello, en el ámbito sanitario se ha comprometido a activar el Servei Valencià de Salut, impulsando la atención primaria, la salud mental y la renovación de la arquitectura sanitaria, "con más de 400 millones de euros en proyectos en marcha en este momento".
En caso del área de educación, se priorizará la Formación Profesional (FP), con el objetivo de alcanzar los 150.000 alumnos frente a los 119.000 actuales, dándole "más voz" a la empresa y reforzando plazas y ciclos en sectores ligados a la movilidad sostenible, la energía o el agua.